El consejero garantiza que el Principado cumplirá con el decreto que hoy entra en vigor
08 nov 2018 . Actualizado a las 17:25 h.El consejero de Sanidad, Francisco del Busto, confía en que el sistema público del Principado permita, con el tiempo, dar cumplimiento a los tiempos máximo de espera para consultas e intervenciones quirúrgicas que marca el decreto que hoy entra en vigor dado que hay «recursos suficientes y muy interesantes» para conseguirlo.
Este decreto de garantías en el acceso a la atención sanitaria fija un plazo máximo de dos meses para las pruebas o procedimientos terapéuticos de mayor impacto en la salud de los pacientes y de seis meses para varias intervenciones quirúrgicas. A partir de hoy, las colonoscopias, mamografías, ecografías, TACs y las resonancias magnéticas deberán efectuarse en un periodo máximo de dos meses mientras que las operaciones de cirugía cardiaca (valvular y coronaria) y cataratas, histerectomías y la implantación de cadera y rodilla tendrán que llevarse a cabo como mucho en 180 días.
Valoración
«Con el tiempo conseguiremos que a todos los pacientes se les pueda ofertar hacer una consulta dentro del sistema público en los tiempos que marcamos», ha señalado el consejero de Sanidad Francisco del Busto. No obstante, ha asegurado que en la sanidad pública asturiana las listas de espera, tanto la quirúrgica como la de consultas, «continúan disminuyendo» y que con ese fin llevan trabajando desde el inicio de la legislatura.
En el caso de las consultas, la reducción suma las 22.000 en tres años ya que se ha pasado de unas 73.000 a unas 51.000, según los datos aportados hoy por el consejero, que ha aclarado que son menos los pacientes los que están en esa lista porque hay muchos que tienen están pendientes de dos o tres pruebas o consultas a la vez. En comparación con otras comunidades autónomas Asturias tampoco sale malparada ya que Del Busto ha recalcado hoy que el Principado está entre las tres o cuatro que presentan mejores ratios del país.
Con este decreto, los ciudadanos, cuando lleguen o estén a punto de llegar a los 60 días de espera se les ofertarán mecanismos alternativos para que puedan realizarse «dentro de los recursos, que son suficientes y muy interesantes dentro del sistema público y de centros concertados mediante convenios». El Servicio de Salud (Sespa) se compromete en este decreto a ofertar al paciente dentro del plazo máximo previsto una intervención quirúrgica o una prueba en alguno de los nueve hospitales públicos de la región o en los centros concertados (Adaro, Jove, Hospital de Avilés y Cruz Roja de Gijón) sin que se contemplen derivaciones a centros privados.
Para lograr estos objetivos, el Sespa dará prioridad a las primeras consultas, las que permiten clasificar la urgencia e importancia de la enfermedad; ofrecerá una respuesta en red desde el sistema público y planificará con seis meses de antelación las agendas desde el servicio de atención al ciudadano. Además, se creará un registro único de pacientes en espera y se expedirán certificados de inclusión en el mismo, sobre el que se informará a las personas interesadas de forma individualizada y confidencial.