Asturias sigue fuera de las ayudas europeas para las regiones mineras

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

PACO RODRÍGUEZ

Ni el Gobierno de Rajoy ni el de Sánchez han hecho los deberes. Nadie ha presentado los proyectos prioritarios para las tres comunidades afectadas por el cierre del sector

26 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La minería está, definitivamente, en peligro de extinción. La estocada se le daba este miércoles con la firma por parte de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y la de Empleo, Magdalena Valerio, los representantes de UGT, CCOO y USO y de la patronal Carbunión del «acuerdo marco para una transición justa de la minería del carbón y desarrollo sostenible de las comarcas mineras para el periodo 2019-2027». Este da muy pocas opciones de supervivencia al carbón nacional puesto que la mayoría de las medidas que contempla van dirigidas a dar una salida a los trabajadores del sector y a comprometer ayudas por un importe de 250 millones de euros en los cinco primeros años de este nuevo plan para las comarcas mineras afectadas por el cierre de la minería. El objetivo de esa cuantía es el de «promover la localización de proyectos de inversión empresarial en las zonas afectadas por la reestructuración de la minería del carbón».

Teniendo en cuenta, además, que España se adhirió el pasado mes de abril a la Plataforma Europea de Regiones del Carbón en Transición, la reactivación e impulso de las cuencas debería estar más que garantizada. El caso es que por la parsimonia del Gobierno de Rajoy (PP) y porque el Gobierno de Sánchez no ha hecho los deberes en ese sentido, las comunidades afectadas por el declive de la minería, entre ellas Asturias, siguen sin poder acceder aún a esas ayudas europeas, cuando la Plataforma se creó hace diez meses y España se incorporó hace seis. El consejero de Industria del Principado, Isaac Pola, reclamaba hace unos días la nominación formal de Asturias como «región piloto» dentro de la Plataforma Europa de las Regiones Mineras de Carbón en Transición con el fin de mantener reuniones bilaterales con la Comisión Europea y proponer proyectos de reactivación en Bruselas. Sin embargo, esa consideración todavía no es posible en tanto que el Gobierno central tiene sin realizar un trámite fundamental: la constitución del equipo-país, del que formarán parte Asturias, Castilla y León y Aragón. Ese trámite administrativo será el que permita a las regiones poder presentar directamente sus proyectos concretos, aquellos que quiere que estén a la cabeza para lograr una rápida financiación.

La presidenta de la Asociación de Comarcas Mineras de Europa (Euracom), Ana Luisa Durán, no entiende que dada la situación a la que el Gobierno central aboca a la minería, éste no haya dado el paso ya para conformar el equipo-país que permita a las regiones carboneras en transición acceder a las ayudas de la Plataforma, la cual se presentó en Estrasburgo en diciembre de 2017, aunque España no anunció su adhesión hasta el pasado mes de abril. «Es importante estar ahí porque los proyectos piloto tendrán un desarrollo más rápido y tienen más posibilidades de financiación», ha explicado Ana Luisa Durán, que apostilla que el equipo-pais «tendría que estar constituido ya y está parado».

La representante de Euracom exonera a las comunidades autónomas de que no estén hechos los deberes y centra toda la responsabilidad en el Gobierno central, en el de antes y en el de ahora, por ser quien tiene que realizar el trámite administrativo en Europa, añadiendo que «es una cuestión de voluntad política del Gobierno central porque en este caso no hay problemas ni diferencias entre las comunidades autónomas que lo conformarían». Así, matiza que «sin el paraguas del equipo-país, Asturias no tiene capacidad para ser región piloto ni para presentar proyectos». El caso es que a principios del próximo mes de noviembre, está previsto que haya una nueva reunión de la Plataforma Europea de Regiones del Carbón en Transición y la preocupación de Ana Luisa Durán es que «en la última reunión habían invitado a las comunidades autónomas a una presentación más larga de los proyectos, pero necesitamos el paraguas del equipo-país y no está formado». En este sentido, explica que la comisaria de Desarrollo Regional comentó en su día que «dotaría de presupuesto los proyectos y no las palabras o sueños». 

Por esa razón y porque considera «muy importante que los países ya estén posicionados» en la Plataforma con sus proyectos, la presidenta de Euracom urge la constitución del equipo-país. «Cuanto más tiempo perdamos, menos posibilidades tendremos de tener proyectos piloto y crear actividad económica en las cuencas», manifiesta antes de advertir que ya hay países como Alemania, «que están en primera línea» pese a que en su caso no están en un proceso de cierre de la minería tan exprés porque «van a mantener las explotaciones de lignito en funcionamiento». «Estar a la cabeza es bueno», concluye Ana Luisa Durán, porque entre los objetivos de la Plataforma está que los diferentes equipo-país de Europa pueden intercambiarse aquellas iniciativas que resultan positivas para la reactivación de los territorios. Otra cuestión que le preocupa a la misma, es que hasta el momento no se haya puesto en marcha el mecanismo de consulta con los ayuntamientos para ver qué proyectos pueden considerar beneficios para el territorio. «No se ha hecho y es preceptivo. Se debe hacer antes de presentar los proyectos», indica la presidenta de Euracom.