La compañía se benefició especialmente dentro del sector de las subastas de interrumpibilidad acaparando el 30% en la última década. «La compañía no ha recibido ningún subsidio energético», sostiene la multinacional
18 oct 2018 . Actualizado a las 22:02 h.La multinacional Alcoa, que ayer anunció el cierre de dos de sus tres plantas en España, obtuvo unos mil millones de euros en las subastas de interrumpibilidad celebradas en España en la última década, según fuentes del sector, recogidas por EFE.
Sólo por la última subasta de interrumpibilidad -en la que se subastan lotes de potencia interrumpible entre empresas que están dispuestas a ser desconectadas en caso de que sea necesario para mantener la seguridad de suministro a cambio de lo cual reciben una compensación- celebrada ingresó unos 90 millones de euros. Alcoa, que ha atribuido el cierre de sus dos factorías al elevado precio de la electricidad en España, ha venido acaparando en la última década el 30 % de la potencia interrumpible adjudicada en las subastas de interrumpibilidad.
Alcoa, como el resto de grandes industrias representadas en AEGE (asociación de empresas con gran consumo de energía), defiende este sistema público de retribución como garantía de supervivencia de las fábricas, ya que los incentivos abaratan sus costes energéticos y les permiten competir en el resto de países europeos. De hecho, existen mecanismos parecidos por Europa adelante. «La industria del aluminio es así, requiere incentivos», incidieron fuentes de la compañía. Y añadieron que: «En comparación con nuestras competidoras europeas, nunca hemos tenido un trato preferencial en este país».
La multinacional rechaza de plano recibir algún «subsidio energético», ya que, recuerda, presta un servicio al sistema a cambio de recibir esos fondos para aliviar sus costes. Formalmente, así es. Las empresas que se adjudican megavatios hora bonificados en las subastas están a disposición de Red Eléctrica de España (REE), el operador del sistema nacional, para ver cómo se corta su suministro eléctrico. Hasta este año, este servicio, que lleva el mismo nombre que las pujas, se activaba básicamente para evitar apagones. Por ejemplo, si fallaba una central de generación eléctrica, REE garantizaba la seguridad del suministro a los consumidores reduciendo consumo a las empresas anotadas en este servicio. Desde este año, también se echa mano de él para abaratar indirectamente el precio de la electricidad.
Este gran peso que tiene Alcoa en estas subastas va a obligar al Ministerio para la Transición Ecológica a rediseñar y replantear la subasta que tenía previsto convocar próximamente, según dijo ayer la titular de este departamento, Teresa Ribera.
De hecho a lo largo de la mañana de este jueves, la ministra de Transición Energética retuiteó un mensaje con un gráfico sobre el coste medio de las tarifas sin la subvención de interrumpibilidad y su influencia en la factura de los particulares.
Por otra parte, la compañía adujo que registró pérdidas por importe de 41 millones de dólares (36 millones de euros) en el tercer trimestre del año, frente al beneficio de 113 millones de dólares (98 millones de euros) correspondiente al mismo periodo de 2017, según informó la empresa, que ha anunciado su intención de cerrar sus plantas de Avilés y La Coruña, por el que se verán afectados un total de 686 trabajadores.
Los resultados de Alcoa en el tercer trimestre reflejan un impacto negativo de 160 millones de dólares (139 millones de euros) por elementos atípicos, sin el que el beneficio neto ajustado de la multinacional sería de 119 millones de dólares (103 millones de euros), un 11,8% menos, señala Europa Press.
La facturación del fabricante de aluminio entre julio y septiembre alcanzó los 3.390 millones de dólares (2.949 millones de euros), un 14,4% por encima de los ingresos de un año antes, mientras que la compañía asumió un impacto negativo de 177 millones de dólares (154 millones de euros).
De este modo, en los nueve primeros meses del ejercicio Alcoa obtuvo un beneficio neto atribuido de 184 millones de dólares (160 millones de euros), lo que representa un descenso del 55,4% en comparación con el mismo intervalo de 2017, mientras su cifra de negocio creció un 18,6%, hasta 10.059 millones de dólares (8.751 millones de euros).
La multinacional ha revisado a la baja su previsión de la demanda mundial de aluminio en 2018, que ahora sitúa entre un 3,75% y el 4,75%, frente a la anterior horquilla de entre el 4,25% y el 5,25%, por la situación en China.
Alcoa ha anunciado su intención de iniciar un periodo formal de consultas para llevar a cabo un despido colectivo en sus plantas de Avilés y A Coruña, por el que se verán afectados un total de 686 trabajadores, tras proceder al cierre de estas fábricas debido a su "improductividad".
Según la compañía estadounidense, se trata de las plantas menos productivas del grupo debido a "problemas estructurales intrínsecos". Alcoa iniciará un periodo de consultas con los representantes de los trabajadores con una duración máxima de 30 días naturales.
De esta forma, Alcoa ha concluido que el cierre de las plantas de Avilés y La Coruña podrá generar unas mejoras organizativas manteniendo la producción en una sola planta en España, la de San Ciprián, también en Galicia, donde se produce tanto aluminio como alúmina.