Pedro Sánchez señala a Barbón como «futuro y esperanza para Asturias» en mayo de 2019
ASTURIAS
El secretario general del PSOE propone un impuesto a la banca para garantizar las pensiones y reclama que suban con el IPC
21 mar 2018 . Actualizado a las 21:34 h.El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, señaló a Adrián Barbón como representante del «futuro y la esperanza para Asturias a partir de mayo de 2019»; fecha en la que tendrán lugar las elecciones autonómicas (además de las locales y las europeas) durante su intervención en una asamblea abierta celebrada en Oviedo sobre el futuro de las pensiones. El secretario general de la FSA destacó durante las primarias regionales que no sería candidato a la presidencia del Principado y que se concentraría en el trabajo interno de la dirección del partido. Sin embargo, con el paso de los meses se han mantenido abierta la expectativa de que pudiera finalmente revertir su decisión y optar a las primarias como candidato en el caso de que se prolongara la división interna dentro de la formación.
La llegada de Sánchez a Asturias --en un acto que se celebró en un hotel de Oviedo después de que la ubicación original, en la propia FSA, se quedara pequeña ante la expectativa de una gran asistencia a la asamblea-- despertó varias especulaciones sobre la participación en ese acto de miembros del Gobierno autonómico y del grupo parlamentario toda vez que en el Escuela de Buen Gobierno celebrada por el partido el anterior fin de semana junto a las presencias pesaran las ausencias de importantes miembros históricos del partido, faltaron Felipe González, Alfredo Pérez Rubalcaba y también Javier Fernández. El presidente asturiano tampoco asistió a la asamblea de Oviedo aunque ya por la mañana el portavoz del Ejecutivo, Guillermo Martínez, había apuntado que tenía encuentros marcados en la agenda, «que es pública», del Gobierno que no podía alterar. A la hora de la cita con Sánchez, Javier Fernández se encontraba con representantes del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Sidra de Asturias, junto a la consejera de Desarrollo Rural, María Jesús Álvarez.
Sí acudieron a la asamblea con el secretario general la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, el consejero de Sanidad, Francisco del Busto, y la consejera de Derechos Sociales, Pilar Varela. Por parte del grupo parlamentario estuvieron en el encuentro su portavoz, Marcelino Marcos (también miembro de la ejecutiva de la FSA) y los diputados Nino Torre y Nuria Devesa. Respecto a los próximos comicios, el secretario general del partido se mostró convencido de que una victoria en las municipales abriría las puertas a un futuro triunfo socialista también en las generales. Por su parte, Barbón, quien destacó la capacidad de haber reunido a un gran número de militantes en apenas día y medio, destacó en su intervención que «queremos que Pedro se sienta cómodo en Asturias y sepa que contamos con él» de cara a esas elecciones. También se dirigió a todos los militantes, y en particular a los que ostentan representación en instituciones públicas, para recordarles que «representan unas siglas centenarias a las que todos nos debemos».
Propuestas para las pensiones
El debate de la asamblea era monotemático sobre las pensiones, después de varias semanas de movilizaciones masivas y un intenso debate sobre su futuro en el Congreso. A la hora de detallar las propuestas del partido en esta materia, Pedro Sánchez, fijó dos ejes fundamentales, por un lado se mostró abierto a recuperar el pacto de Toledo y las conversaciones con el Gobierno de Rajoy toda vez que el PP acepte que las jubilaciones aumenten con el IPC de manera que no pierda poder adquisitivo. Además, para garantizar su financiación, el secretario general de los socialistas defendió la creación de un impuesto a la banca.
«Lo hay en el Reino Unido y lo creó un gobierno conservador, el de David Camero, y en Francia hay un impuesto a las transacciones financieras en bolsa», explicó Sánchez quien criticó además el «triple fracaso» del gobierno del PP respecto al trabajo y las pensiones ya que «se han troceado los empleos fijos en temporales con la reforma laboral y con las horas extraordinarias que no se pagan se están dejando de recaudar 2.000 millones de euros en cotizaciones, precisamente la cantidad que nos permitiría actualizar las pensiones con el IPC».