
Las instrucciones para este curso recogen que pongan especial atención a la coordinación de las tareas escolares, al programa de préstamo de libros y al acoso
05 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Los inspectores tienen nuevas tareas encargadas para este curso. La Consejería de Educación acaba de publicar el plan de actuación 2017/2018 en el que marca las prioridades. Entre las instrucciones destaca, por primera vez, que se ponga especial atención a la coordinación de los deberes escolares en los centros. Del mismo modo, reclama que se ponga el foco en la convivencia, que se promueva la resolución de conflictos y que se prevengan los casos de acoso entre iguales. Otro aspecto importante es la revisión del funcionamiento del programa de préstamos de libros que ha sustituido al tradicional cheque-beca para la compra. Después de unos años de rodaje, en los que ya se han podido consolidar los bancos de préstamos, la administración pretende que se realice una tarea de «seguimiento de la organización y el funcionamiento del programa, en una muestra de centros públicos».
Así consta en la resolución de 14 de noviembre, publicada por el Boletín Oficial del Principado (BOPA) el pasado 30 de noviembre, que lleva por título, Resolución por la que se aprueba el Plan de Actuación del Servicio de Inspección Educativa para el curso académico 2017/2018. No solo pone su mirada sobre la red pública. También lo hace en la privada y en la concertada, aunque con temas diferentes. Los deberes solo se analizarán en la escuela pública. Pero, por ejemplo, en los privados quiere que se supervisen las materias de libres configuración y en los concertados que se verifique el pago delegado de los horarios a los profesores. En los Conservatorios quiere que se supervise la adecuación del horario curricular del alumnado a la normativa vigente.
Los deberes
La asignación de tareas escolares fuera del horario lectivo tiene firmes defensores y encendidos detractores. En los últimos años, ambos bandos han esgrimido diferentes estudios para apuntalar sus argumentos. Una investigación asturiana, presentada el curso pasado, señalaba que los deberes en Primaria no mejoran las notas. También determinaba que los niños hasta los 11 años tienen más tareas de las aconsejables y, además, apenas tienen efecto en los resultados. En cambio, sí mejoran el rendimiento en Secundaria. La Federación de Padres y madres Miguel Virgós, mayoritaria en la pública, convocó varias huelgas de deberes en fechas señaladas. Sin embargo, la Concapa, con más implantación en la escuela concertada, secundaba la necesidad de trabajar en casa. En medio de toda la polémica, también intervinieron los profesores, que se sintieron cuestionados en su trabajo.
La Administración educativa asturiana incluyó este asunto en la circular de inicio de curso que remite a las direcciones y que es la que marca las líneas maestras para todo el año. En ese documento, se hablaba ya de coordinar los encargos. El propio consejero, Genaro Alonso, habló del tema. «Lo que queremos es introducir mucho sentido común en este aspecto y una mayor coordinación entre el profesorado sobre los deberes, que tienen que ser adecuados en cantidad y calidad, razonables, y siempre en beneficio del alumno», señaló. También negó que esta decisión no suponía atacar la autonomía de los centros.
La consejería refuerza el mensaje ahora con la tarea de los inspectores educativos. No marca una línea concreta ni tampoco demasiado estricta. Se limita a señalar que se debe «prestar especial atención a la coordinación de los deberes escolar». También quiere que se revise la forma en la que se desarrolla el plan de lectura, así como los procedimientos de evaluación del alumnado de acuerdo con los criterios de evaluación y estándares de aprendizaje del currículo. Lo mismo sucede con los bancos de libros y el programa de préstamos de libros. Todos estos aspectos aparecen referenciados en las instrucciones.
Para Formación Profesional (FP) incorpora otras tareas nuevas. Los inspectores encargados de estos centros y de los especializados en enseñanzas deportivas deberán supervisar los procesos de evaluación de los alumnos y las convalidaciones de módulos que se realicen entre diferentes ciclos formativos. Tendrán que seleccionar una muestra de institutos para realizar esta tarea específica.