Macron busca un Gobierno al margen de los extremistas de Le Pen y Mélenchon

Asunción Serena PARÍS / E. LA VOZ

ACTUALIDAD · Exclusivo suscriptores

El presidente Emmanuel Macron, este lunes en el Elíseo.
El presidente Emmanuel Macron, este lunes en el Elíseo. MOHAMMED BADRA | EFE

El presidente francés cita al resto de los partidos para debatir una base programática

13 dic 2024 . Actualizado a las 21:55 h.

Tras un fin de semana dedicado a la resurrección de catedral de Notre Dame de París, Emmanuel Macron se afana en encontrar un nuevo gobierno con una base suficientemente amplia que le permita sortear el poder de la extrema derecha en la Asamblea y evitar así una moción de censura.

Este lunes comenzó el día con una nueva ronda de consultas entre los diferentes partidos políticos para buscar compromisos que le faciliten el nombramiento de un sucesor de Michel Barnier. El jefe del Ejecutivo estará encargado de formar «un gobierno de interés general» que podría ser una especie de arcoiris en el que estuvieran representadas todas las fuerzas políticas de izquierda a derecha, a excepción de los extremos, como ya intentó, sin éxito, el pasado verano.

Pero esta vez, Emmanuel Macron propone un «nuevo método», para construir el futuro gobierno, según los ecologistas, que fueron recibidos por el presidente galo, después de entrevistarse con el grupo de independientes Liot y comunistas.

A su llegada al palacio del Elíseo, Marine Tondelier, secretaria nacional de Los Verdes, declaró que «cada cual debe dar un paso hacia el otro», aunque estima que corresponde al presidente de la República «proponer algo que no sea simplemente la continuidad de su política» y que responda a la «alternancia» que, según ella, han reclamado los electores en los últimos comicios legislativos.

Tras la reunión con Macron, Marine Tondelier aseguró que este no quiere seguir dependiendo de Marine Le Pen. «Ha dejado muy claro que no considera a la Agrupación Nacional (RN) como uno de los partidos con los que desea dialogar», indicó la líder ecologista. Según Le Parisien, que cita fuentes cercanas al presidente francés, esta idea «corresponde a lo que piensa Macron, que hay que librarse de las garras del RN y de La Francia Insumisa (LFI)».

El secretario nacional del Partido Comunista, Fabien Roussel, se mostró, por su parte, partidario de cooperar en la creación de un nuevo gobierno. Pero, mientras el pasado viernes, el líder de los socialistas, Olivier Faure, reclamó «un primer ministro de izquierdas», los comunistas piensan que es «preferible» aunque no lo exigen como «requisito previo». «Hemos dicho que por supuesto es preferible que haya un primer ministro con sensibilidad de izquierdas para preservar el poder adquisitivo, los servicios públicos y nuestra industria», comentó Roussel tras entrevistarse con Macron, pero «lo que cuenta es que avancemos, y para avanzar no venimos aquí con ideas preconcebidas sobre nombres, ni líneas rojas».

Los dirigentes de La Francia Insumisa también habían sido invitados al Elíseo, pero se negaron a acudir porque rechazan cualquier compromiso con los macronistas, alejándose así del resto de los componentes de la alianza de izquierdas, el Nuevo Frente Popular. Su líder, Jean-Luc Mélenchon, reprocha al socialista Olivier Faure querer ser primer ministro a toda costa. En cambio, para él lo único que vale es la dimisión de Macron y la celebración de elecciones presidenciales anticipadas.

Los diversos participantes en las reuniones con Macron aseguraron que el jefe del Estado les comentó que iba a proponer un nuevo «método» de trabajo que consistiría en organizar una «reunión de las distintas fuerzas políticas para debatir una plataforma programática». Según los ecologistas, esa reunión podría celebrarse hoy martes. Si se lleva a cabo, sería la primera vez que el presidente reúne a varios bloques políticos en torno a la misma mesa desde la disolución de la Asamblea.