Los rebeldes sirios avanzan y toman Deraa, cuna de la Primavera Árabe, mientras se retiran las tropas de Al Asad y de Irán

La Voz REDACCIÓN

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Un militar rebelde se hace un selfie frente a un edificio del Gobierno después de tomar la ciudad de Hama, este viernes
Un militar rebelde se hace un selfie frente a un edificio del Gobierno después de tomar la ciudad de Hama, este viernes BILAL AL HAMMOUD | EFE

El régimen insiste en que seguirá haciendo frente al «terrorismo» con «todas sus fuerzas» y no habla de retirada sino de «redespliegue»

07 dic 2024 . Actualizado a las 10:23 h.

Los rebeldes sirios han tomado el control de la ciudad de Deraa, en el sur de Siria y capital de la provincia homónima, después de que las fuerzas leales a Bashar al Assad hayan iniciado en la región lo que el régimen ha descrito como un «redespliegue» que se extiende también a Sueida, áreas ambas en el sur del país.

El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Londres e informantes en el país, ha señalado que «las facciones locales» controlan «más del 90 por ciento de la provincia de Deraa en medio de sucesivas retiradas de las fuerzas del régimen».

«Las facciones habían pedido a las fuerzas del régimen y a los servicios de seguridad en la provincia de Deraa que desertaran de inmediato, además de haber logrado avances significativos sobre el terreno desde las primeras horas de la mañana», han explicado. Así, los rebeldes pudieron hacerse con el control «total» de «numerosos emplazamientos militares, puestos de control y cuarteles».

El Ministerio de Defensa ha confirmado el «redespliegue» de tropas, un eufemismo utilizado también en los últimos días tras perder el control de manera fulgurante de otras zonas de Siria, especialmente en la zona noroeste. El régimen, no obstante, ha insistido en que seguirá haciendo frente al «terrorismo» con «todas sus fuerzas».

Imagen de la ciudad de Deraa, en el sur de Siria
Imagen de la ciudad de Deraa, en el sur de Siria CONTACTO vía Europa Press | EUROPAPRESS

Deraa es conocida como la cuna de la Primavera Árabe en Siria, la revolución que comenzó con el arresto de un grupo de jóvenes por hacer pintadas contra el Gobierno y acabó degenerando en una guerra civil.

El Ejército sirio recuperó el control de la provincia en 2020 gracias al apoyo de Rusia y un acuerdo mediado por Damasco y Moscú acabó dejando dejando su control en manos de un heterogéneo colectivo de grupos locales, como la Octava Brigada o los Comités Centrales, en medio de un escenario enormemente conflictivo.

Irán estaría retirando personal militar y diplomático de Siria, según el New York Times

Irán estaría retirando su personal militar y diplomático de Siria, tanto de su embajada en Damasco como de bases militares de la Guardia Revolucionaria que mantiene en el país, informó este sábado el New York Times (NYT), citando fuentes oficiales iraníes sin identificar.

En su nota, el diario estadounidense, que destaca este movimiento iraní como un «signo de la incapacidad de Teherán para ayudar a mantener al presidente sirio Bachar al Asad en el poder mientras enfrenta la resurgente ofensiva rebelde».

Entre el personal que se estaría retirando hacia el Líbano e Irak estarían los máximos comandantes en Siria de la Fuerza Al Quds, la rama de acción exterior de la Guardia Revolucionaria, además de personal diplomático, familias y civiles iraníes.

El NYT indica que sus fuentes son «funcionarios regionales y dos miembros de la Guardia Revolucionaria».

Mehdi Rahmati, analista de asuntos iraníes consultado por el diario neoyorquino, apuntó en la nota que esta retirada implica que «Irán se ha dado cuenta de que no puede manejar la situación en Siria ahora mismo con ninguna operación militar, y que esa opción ahora está fuera de la mesa».

Irán es, junto con Rusia y el grupo chií libanés Hizbulá, el principal aliado de Damasco y su ayuda e intervención militar fue determinante para evitar el colapso del Gobierno sirio desde 2012.

Esos tres aliados de Al Asad están ahora en una situación de debilidad, después de que la guerra de Israel contra Hizbulá en el Líbano haya dañado seriamente las capacidades del grupo armado, al tiempo que Rusia está envuelto en la invasión de Ucrania.

Oficialmente, según indicó ayer mismo durante una visita a Bagdad el ministro de Exteriores iraní, Abás Araqchí, Irán mantiene su apoyo inquebrantable a Damasco «en su lucha contra los grupos terroristas takfiríes (extremistas suníes) que salen, sin duda alguna, de una conspiración estadounidense-sionista».

Araqchí se refirió así al Organismo de LIberación del Levante (Hayat Tahrir al Sham o HTS, en árabe), principal grupo que dirige la ofensiva contra Damasco que comenzó el pasado 27 de noviembre, cuyo origen está en el Frente al Nusra, la que era la filial siria de Al Qaeda.

En el caso de que Siria «caiga en el terrorismo», hay que «esperar el regreso del Estado Islámico, lo que será una gran amenaza a los países de la región», como Irak, Jordania o Turquía, señaló el ministro.

El Estado Islámico, derrotado militarmente en 2019, aún mantiene alguna presencia en el amplio desierto del centro de Siria.

Este sábado está previsto que se produzca en Catar, en los márgenes del Foro de Doha, una reunión tripartita entre Rusia, Irán y Turquía, el principal valedor y apoyo de los grupos insurgentes contra Al Asad, para buscar una solución a la crisis.