Al reconocimiento de Edmundo González como presidente electo se une la aprobación por republicanos y demócratas de una ley que veta contratos ligados al régimen chavista «ilegítimo»
20 nov 2024 . Actualizado a las 20:02 h.La Administración Biden endureció el tono contra Nicolás Maduro antes de la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y la de Macro Rubio —enemigo declarado de la revolución bolivariana— a la Secretaría de Estado con dos iniciativas: el reconocimiento de Edmundo González Urrutia como presidente electo de Venezuela y la aprobación de la ley Bolívar, un proyecto bipartidista que busca cortar el apoyo económico al régimen chavista.
El reconocimiento de González lo anunció el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, a sus homólogos el martes en la cumbre del G20 en Río de Janeiro. «El pueblo venezolano se pronunció contundentemente el 28 de julio (...) la democracia exige respeto a la voluntad de los votantes», señaló.
Ese mismo martes, la Cámara de Representantes de EE.UU. aprobó un proyecto de ley respaldado por republicanos y demócratas que prohíbe a la Administración contratar a personas o empresas vinculadas con el «gobierno ilegítimo de Nicolás Maduro». La ley Bolívar (acrónimo en inglés de Prohibición de Operaciones y Arrendamientos con el Régimen Autoritario Ilegítimo de Venezuela) fue presentada por dos representantes de Florida: la demócrata Debbie Wasserman Schultz y el republicano Mike Waltz, próximo asesor de Seguridad Nacional de Trump.
Desde su exilio en Madrid, Edmundo González agradeció al Gobierno estadounidense «el reconocimiento a la voluntad soberana de todos los venezolanos» e insistió en que estará en Caracas el 10 de enero para tomar posesión como presidente.
Waltz señaló que con la ley Bolívar muestra a Maduro que «no habrá apaciguamiento, no habrá tolerancia, no habrá recompensa por sus acciones ilegales y deshonestas», adelantando lo que será la línea del próximo inquilino de la Casa Blanca.
En un comunicado, el ministro de Exteriores venezolano, Yván Gil, calificó de «ridículo» el reconocimiento del líder opositor, e instó a Washington «a escribir las memorias de cómo la revolución bolivariana le hizo morder el polvo de la derrota».
El presidente de la Asamblea Nacional oficialista, Jorge Rodríguez, exigió, por su parte, la «inhabilitación perpetua» contra quienes apoyen la ley Bolívar, en obvia referencia a la lidere opositora María Corina Machado, mencionada por Waltz como «un rayo de esperanza» en la crisis venezolana.