Susie Wiles, jefa de la campaña, suena como jefa de gabinete, mientras en la lista de miembros está Musk, Kennedy Junior y Marco Rubio
08 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Las reuniones en Mar-a-Lago, la residencia de Donald Trump en Florida, son frenéticas porque el presidente electo se ha puesto manos a la obra para seleccionar a las figuras clave de su Gabinete. No tenía nombres pensados de antemano, dijeron fuentes consultadas por The Washington Post, porque es supersticioso y no quería reflexionar sobre ello antes de las elecciones.
La actividad ha comenzado tan pronto que algunos de los asistentes presentes en su discurso de la victoria han cancelado su vuelta a casa y se han quedado en Florida para participar en las conversaciones.
Destacable es la presencia en Mar-a-Lago, estos días, de Elon Musk, el magnate sudafricano dueño de Tesla, Space X y la red social X, que ha sido una figura fundamental en la campaña electoral de Trump y al que algunos vislumbran como una figura clave en la conformación del Gabinete.
Musk incluso llegó a referirse en campaña a la creación de un departamento de eficiencia gubernamental para recortar el presupuesto federal en unos 2 billones de dólares después de evaluar el rendimiento de las agencias oficiales.
Tanto los futuros miembros de su Gobierno como otros 1.200 puestos administrativos requieren la aprobación del Senado para empezar a trabajar. La amplia mayoría que Trump tendrá en la Cámara —ya el martes superó los 51 senadores y podría llegar a 55— posibilita que sean propuestos para esos puestos figuras más disruptivas como la del propio Musk, porque permite al presidente electo evadir el veto de los elementos más centristas de su partido en el Congreso.
Otra de las figuras polémicas es la del excandidato presidencial Robert Kennedy Junior, quien renunció a la carrera en verano para apoyar a Trump. Este antivacunas tendrá un papel relevante en el sector de la salud. Esta semana ya dijo que tenía que haber despidos en la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA en inglés) porque muchos miembros son «ineptos» y «no están haciendo su trabajo». Lidera una campaña contra los elementos nocivos en la comida.
Varios medios de comunicación sitúan también a Marco Rubio, senador hispano por Florida, que ya sonó para la vicepresidencia, como uno de los candidatos predilectos para ocupar el puesto de secretario de Estado (jefe de la diplomacia), algo que supondría un cambio de paradigma porque conllevaría una mayor atención a América Latina de un político cuya retórica es explosiva contra los Gobiernos de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Para secretario del Tesoro suenan con fuerza el inversor multimillonario John Paulson y el actual asesor económico de Trump, Scott Bressent, también inversor.
El republicano quiere rodearse de leales y lo tiene más fácil con su mayoría en el Senado, después de que, según el Post, solo la mitad de sus secretarios durante su anterior período presidencial apoyaran decididamente su nueva candidatura electoral. Y en ese club de fieles está la veterana Susie Wiles, la jefa de su segunda campaña que se curtió asesorando a Ronald Reagan. Esta mujer de 67 años suena como la jefa de gabinete del nuevo presidente.