Sánchez atribuye el ataque a la comitiva de autoridades en Paiporta a «grupos ultras perfectamente organizados»
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El PP anuncia que no aprobará los presupuestos y acusa al socialista de «utilizar a las víctimas en un chantaje por su interés»
06 nov 2024 . Actualizado a las 04:35 h.Aunque pidió no desviar el foco de lo fundamental —las víctimas de la dana— porque «las necesidades son muchas y muy urgentes», Pedro Sánchez atribuyó ayer el ataque a la comitiva de autoridades el pasado domingo en Paiporta (Valencia) a «grupos ultras perfectamente organizados».
El presidente del Gobierno, que no acudirá esta semana a la reunión de líderes de la Unión Europea en Budapest (Hungría) para gestionar la catástrofe, apuntó que «es muy fácil diferenciar a aquellos que manifiestan su ira de una manera legítima, por su frustración, por la situación que están viviendo, de otros grupos ultras perfectamente organizados que iban a tratar de hacer el mayor daño posible».
Cabe recordar que un juzgado ya investiga los altercados por presunto atentado a la autoridad, desórdenes y daños, y que la Guardia Civil trabaja en identificar a los autores y en precisar si pertenecen a grupos de ultraderecha. En rueda de prensa, tras el Consejo de Ministros de este martes, el socialista agradeció las muestras de solidaridad recibidas tras ser golpeado con un palo en la espalda y aseguró que se encuentra «bien».
Las cuentas «más necesarias»
Sánchez dijo que sustituir a la Administración autonómica y ponerse al frente de la crisis restaría eficacia en la respuesta, y abogó por «trabajar codo con codo» con la Generalitat. El presidente espera conseguir ahora el apoyo mayoritario del Congreso para aprobar los presupuestos del 2025, que son «más necesarios que ayer» para afrontar el gasto millonario de las ayudas por la dana. Sin embargo, el PP anunció que no aprobará las cuentas, acusó al jefe del Ejecutivo de «utilizar a las víctimas en un chantaje por su interés», y señaló que las ayudas a los damnificados pueden aprobarse fuera del debate presupuestario. Una opción que apoyó el mandatario regional, el popular Carlos Mazón.
Las críticas al socialista llegaron también desde su propio partido. El expresidente Felipe González (1982-1996) indicó, en un encuentro organizado por El Norte de Castilla en Valladolid, que él «no habría dicho ‘que me pidan lo que necesiten’, no lo habría dicho», en referencia al pasado sábado, cuando Sánchez le trasladó a Mazón que «si necesita más recursos, que los pida».
Se dirigió a este último Joan Baldoví, de Compromís, que insistió en que el popular «no debe seguir ni un minuto más al frente» de la crisis dada su incompetencia, criticó que concediera un «rosario de entrevistas culpando a todos menos a sí mismo» y opinó que dimitir es «una salida digna y la única que le queda».