El Ejército se despliega en Valencia y los muertos a causa de la dana suman 158

María Salgado
María Salgado REDACCIÓN / LA VOZ

ACTUALIDAD

Vecinos de Paiporta recogen agua potable de un camión de la UME, este jueves
Vecinos de Paiporta recogen agua potable de un camión de la UME, este jueves Manuel Bruque | EFE

La UME garantizará los suministros básicos a los damnificados, 366.000 siguen sin agua potable y 78.000, sin luz

01 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Un paisaje apocalíptico de pueblos arrasados por la dana sin luz ni teléfono ni agua potable donde vecinos hambrientos vagan en busca de algo que llevarse a la boca. Algunos huyen a pie varios kilómetros sobre el barro hasta una carretera transitable donde un coche los recoja, otros se quedan a desenterrar cuerpos aunque no tengan ni palas. Pueblos como Paiporta, Chiva, Masanasa, Alfafar, Sevadí. El Ejército se desplegará hoy, a partir de las ocho de la mañana, en la Comunidad Valenciana por tierra, mar y aire «para reforzar las labores logísticas y de distribución de ayuda a la población», como solicitó ayer el presidente regional Carlos Mazón, que cifró en al menos 155 las víctimas mortales en su territorio. Es un balance solo provisional, dado que todavía hay decenas de desaparecidos, y al que hay que sumar los tres fallecidos en Alhaurín de la Torre (Málaga), Mira (Cuenca) y Letur (Albacete). Son 158 vidas perdidas.

Tras la reunión del comité de crisis en la Moncloa, el Gobierno central decidió ampliar el despliegue de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que añadirá 500 miembros a los 1.200 que se incorporaron el pasado martes. Son cien de la Guardia Real, doscientos de otras unidades de Tierra, cien del Aire y cien de la Armada. De hecho, será la UME la encargada de garantizar la llegada de suministros básicos a MercaValencia para su posterior reparto a la ciudadanía. Así lo anunció el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, quien admitió que «hay decenas y decenas de desaparecidos. La colaboración va a ser absoluta» y recordó que el número de policías nacionales en las áreas afectadas es ya de 1.800.

La Guardia Civil enviará a 280 agentes de apoyo a los 750 que trabajan en la zona desde que se decretó la alerta. A ellos se unirán 24 perros de la unidad canina y equipos certificados por Naciones Unidas en búsqueda y rescate urbano. Además, a partir de este viernes, y de «manera permanente», el titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, se sumará al equipo del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) del 112 de esta autonomía.

También crece el equipo que practica las autopsias. Ocho forenses y tres auxiliares de forense, enviados por el Ministerio de la Presidencia, ayudarán a los médicos forenses locales, de Castellón, Madrid, Baleares, Alicante y Murcia que trabajan en la Ciudad de la Justicia, Feria Valencia y el Instituto de Medicina Legal, tres espacios convertidos en morgues improvisadas. «Se tardará semanas en realizar la identificación de los cadáveres», reconocieron.

Más de 120 carreteras cortadas

Dos días después de que las lluvias torrenciales devastaran el mapa del Levante peninsular —fotografiado desde el espacio por el sistema satelital Copernicus— la situación seguía siendo catastrófica. A última hora de este jueves, en la provincia de Valencia, 366.000 habitantes de veinte municipios continuaban sin agua potable; 78.000 abonados, sin suministro eléctrico; y 200.000 personas, sin teléfono. Tráfico pidió a la ciudadanía permanecer en casa y evitar circular por las áreas afectadas, ni siquiera para ofrecer ayuda. Las autovías A-3 y A-7 tienen varios tramos cortados y 120 carreteras son intransitables en la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Andalucía. De forma preventiva, más de 400 camiones fueron embolsados en cuatro puntos de la provincia de Teruel, aunque ya se les permite dirigirse hacia Castellón.

El instituto armado trabaja a destajo, y cifró en 3.400 los rescates realizados hasta la fecha y en 300 las personas que permanecen aisladas por las inundaciones en la provincia de Valencia. En la zona cero de la tragedia, el pueblo de Paiporta, el número de fallecidos ascendió a 62; entre ellos, un guardia civil y la pareja de otro agente. Y en el barrio valenciano de La Torre, el más afectado de la urbe, hallaron siete cadáveres en un garaje, uno de los cuales fue identificado como policía local. «Muchas personas que estaban en plantas bajas pueden estar allí atrapadas. La labor es muy intensa y muy dura. No podemos precisar el número exacto, pero hay muchas personas desaparecidas», apuntó la ministra de Defensa, Margarita Robles, el miércoles en Telecinco, donde se mostró muy preocupada por la situación de Masanasa y Paiporta.

Al menos 450 personas fueron acogidas en albergues y más de 1.200, en recursos de la Cruz Roja, porque perdieron sus viviendas. La Generalitat anunció ayudas por 250 millones para los damnificados que serán complementarias a las de otras administraciones.