Felipe VI pide unidad mientras el Gobierno y el PP buscan responsables
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La Aemet explica que elevó a las siete de la mañana el aviso rojo
01 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El Gobierno y el PP, que gobierna en la Comunidad Valenciana, protagonizaron este jueves su enésima disputa dialéctica. Esta vez sobre un asunto capital: la responsabilidad ante la dana más mortífera del siglo. Mientras el rey Felipe VI, que visitará este fin de semana las zonas afectadas, pedía a «todos, administraciones, instituciones, ciudadanos y sociedad civil de toda España [...] permanecer unidos en el apoyo y la ayuda», el Ejecutivo y el PP buscan evadir culpas.
Tanto el líder de los populares, Alberto Núñez Feijoo, como el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pasaron este jueves por el Centro de Coordinación Operativa Integrada (Cecopi) en La Eliana, a solo cinco kilómetros de Ribarroja del Turia, uno de los municipios afectados por la dana. Primero lo hizo el líder de la oposición. Feijoo eximió de responsabilidad al Gobierno valenciano: «Nadie puede tomar decisiones en función de una información que puede ser exacta, que puede ser inexacta, que puede ser mejorable...». El presidente popular, cuestionado por si los protocolos funcionaron correctamente, remarcó que los datos que recibe la Generalitat provienen de «organismos con competencia exclusiva del Gobierno central». Y citó dos: la Aemet y la Conferencia Hidrográfica. Además, Feijoo elogió la colaboración de alcaldes y presidentes autonómicos: «Han cargado con el peso de esta emergencia nacional». Feijoo, además, le reprochó al Gobierno que, como jefe de la oposición, no fue informado de nada. «Lo que sí sobra en estos momentos es una crítica», le afeó el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres.
Mazón acompañó a Feijoo y, más tarde, a Sánchez. Ambos, pese al tono crítico del líder del PP, mostraron unidad. El líder autonómico agradeció la presencia «rápida y adecuada» del Gobierno central. Sánchez, por su parte, le garantizó a Mazón la colaboración del Ejecutivo por «tierra, mar y aire» con todos los recursos posibles.
El Ministerio del Interior y la propia Aemet salieron al paso tras las palabras de Feijoo. La agencia estatal destacó en un comunicado que «el impacto de los fenómenos meteorológicos depende de la preparación para afrontarlos». Acto seguido, y después de recordar que son los responsables a nivel nacional de las predicciones, aportó la cronología de las informaciones que fue publicando. La Aemet «vinculó geográficamente el desarrollo de la dana en el Levante español» primero el 24 de octubre y seguidamente los dos días posteriores.
La Aemet prosigue el seguimiento de su labor hasta llegar al fatídico martes: a las siete y media de la mañana elevó a rojo el aviso; lo amplió a todo el litoral de Valencia cinco minutos después y, ya a las 9.41 horas, se elevó el aviso rojo a toda la provincia.
En su último repaso cronológico, apunta que a las 17.49 horas prolongó la alerta roja. Mazón, a la una de la tarde, advirtió de que el temporal disminuiría de intensidad precisamente a las seis.
También entró de lleno al debate de culpabilidades el Ministerio del Interior. El departamento pone el foco en las alertas a los móviles de los ciudadanos. El miércoles, Mazón aseguró que el sistema de alertas, «protocolarizado y estandarizado», estaba «coordinado» por la Dirección General de Protección Civil del Gobierno de España.
Interior recordó este jueves que la activación de los planes territoriales de Protección Civil ante una emergencia de cualquier tipo y su posterior gestión es «responsabilidad exclusiva» de las autoridades autonómicas. La primera alerta del protocolo de gestión ES-Alert —que ganó relevancia en septiembre del 2023 con una alerta en Madrid que funcionó más como prevención— llegó a los teléfonos de los valencianos a las ocho de la tarde, doce horas después de que la Aemet elevara al rojo la alerta: ¡Mucha precaución! ¡El peligro es extremo! No viaje salvo que sea estrictamente necesario».
Andalucía también sufrió los estragos de las fuertes lluvias. Su presidente, el popular Juanma Moreno, criticó al Gobierno central por no activar la «situación operativa 3 del plan estatal y la dirección y coordinación por parte del Ministerio del Interior».
Nivel de alerta 2
La Comunidad Valenciana decretó el nivel 2 a las tres de la tarde en la comarca de la Plana de Utiel-Requena a las tres de la tarde y lo amplió a toda la provincia cuatro horas después. Este nivel contempla que el riesgo es a nivel autonómico y no local, por lo que la autoridad la ejerce el Gobierno autonómico, que puede solicitar la ayuda de la Unidad Militar de Emergencias (UME). En este punto reside el reproche de Moreno, que entiende que la afección de la dana trascendió el ámbito autonómico, al causar daños no solo en Valencia, sino también en Murcia, Castilla-La Mancha, Baleares y la comunidad andaluza. «La catástrofe es una emergencia nacional y requería la dirección del Gobierno», remarcó.
Que el Gobierno central asuma el mando requiere la activación del nivel 3 del sistema de Protección Civil. Los Gobiernos de Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana no solicitaron su activación. El Ejecutivo central tiene potestad para activarlo sin necesidad de ninguna solicitud, pero esto habría supuesto apartar de la gestión de la emergencia a los principales mandos autonómicos. Según remarcan fuentes gubernamentales a El País, el Gobierno sopesó activarlo, pero finalmente consideró que el Ejecutivo valenciano actuaba «correctamente» y que, de haberlo hecho aplicado de forma unilateral habría sido «como aplicar un [artículo de la Constitución] 155».