Los libros y la música son dos de los sectores más castigados
28 oct 2024 . Actualizado a las 16:58 h.En el 2023, la piratería digital en España aumentó un 5 %, alcanzando los 33.957 millones de euros, con unos 5.079 millones de contenidos ilícitos defraudados. Respecto a los creadores y las industrias culturales, el perjuicio fue de 1.992 millones de euros.
Según los datos del Observatorio de la piratería y hábitos de consumo de contenidos digitales 2023, elaborado a instancias de la Coalición de Creadores e Industrias de Contenidos, la piratería ha lastrado la creación de empleo en 107.410 puestos de trabajo directos e indirectos mientras que las arcas públicas dejaron de percibir 600 millones de euros.
Los libros, el producto más pirateado
El producto que más piratean los españoles son los libros, con un 37 % de ellos recurriendo a la descarga ilegal para obtener libros digitales, lo que supone un aumento del 4 % anual. En segundo lugar, se encuentra la música, con un 3 de cada 10 españoles pirateándola, aunque esta ha descendido un 7 % respecto al 2022.
A continuación, se encuentran los periódicos, a los que acceden de forma ilícita un 26 %. Un porcentaje similar descarga imágenes pirateadas, un 25 %, mientras que un 22 % lo hace con películas, series y revistas temáticas y un 15 % con los videojuegos.
Atendiendo a la cantidad defraudada, la música es la más afectada. De los 33.957 millones de euros defraudados, 11.320 millones corresponden a unos 2.369 accesos ilícitos a contenidos musicales. Luego están los videojuegos, con 9.117 millones de euros, y las películas, con 550 millones de filmes a los que se accedió sin permiso y que supusieron pérdidas estimadas en 6.153 millones de euros.
El principal motivo: «No pagar por algo que no me guste»
El estudio del observatorio muestra que 6 de cada 10 españoles que piratean lo hacen para evitar pagar por contenidos que, luego, posiblemente no le gusten. Además, un 52 % reconoce que el acceso a estos contenidos piratas es «rápido y sencillo» y un 38 % recurre a esta práctica porque «no pasa nada y lo hace todo el mundo».
Un 46 % afirma no saber distinguir entre plataformas legales e ilegales. Algunos criterios que siguen los encuestados para distinguirlo son relacionar la legalidad con la disponibilidad de los datos de contacto de la empresa (cerca del 50 %), con la solicitud de registro (27 %), con el hecho de que los métodos de pago tengan logos conocidos (26 %) y con que se publiciten marcas reputadas (18 %).
A pesar de recurrir a la piratería, una mayoría (7 de cada 10) admite que los creadores y las industrias culturales son un sector estratégico.
En cuanto a las plataformas, Google encabeza los buscadores para acceder a contenidos ilícitos, haciéndolo en un 92 % de los casos. Las aplicaciones de mensajería instantánea y las redes sociales son dos vías también habituales. Facebook (con el 31 %) encabeza las preferencias de los consumidores, seguido por YouTube (28 %), WhatsApp (24 %), Instagram (23 %) y X (18 %).
El observatorio de 2023 se detiene en dos plataformas: Telegram, que usa más de la mitad de los internautas, y WhatsApp, el 40 %.
En estas plataformas, los contenidos más pirateados son imágenes (8 %), películas (4 %), series (3 %), libros, periódicos y revistas (3 %) y música, otro 3 %. Respecto a las fuentes de financiación de los portales ilegales de contenido, el 65 % admite que se ha registrado, el 52 % aportó el correo electrónico y el 21 % su número de teléfono.
La publicidad es la mayor fuente de financiación (está presente en nueve de cada diez portales) y uno de cada cuatro usuarios reconoce que ha pagado por acceder al contenido digital.