Europa lanza con éxito la misión que demostrará si somos capaces de desviar un asteroide que se aproxime a la Tierra
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Hera, que fue puesta en órbita por un cohete Falcon desde Cabo Cañaveral, es el primer proyecto europeo de defensa planetaria
07 oct 2024 . Actualizado a las 19:08 h.La Agencia Espacial Europea (ESA) ha lanzado este lunes 7 de octubre con éxito la misión espacial Hera desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral (Florida).
El lanzamiento de Hera se ha realizado satisfactoriamente a las 16.52 horas con un cohete SpaceX Falcon 9. La misión forma parte de la estrategia de defensa planetaria frente a colisiones de asteroides y representa una continuación de la prueba realizada por la NASA en septiembre de 2022, cuando la misión Double Asteroid Redirection Test (DART) impactó a Dimorphos para modificar su órbita.
Los primeros estudios realizados por la NASA determinaron que se había logrado desviar la trayectoria, pero se desconoce si ha sido solo de forma ligera o de forma importante. De ahí que ahora la misión europea seguirá al sistema binario de asteroides conformado por Dimorphos y Didymos para comprobar si esta estrategia ha tenido éxito real o no.
«La misión ESA Hera ha despegado a bordo de un Falcon 9 de SpaceX desde la estación espacial de Cabo Cañaveral, en Florida (EE.UU.), el 7 de octubre a las 10:52 hora local (16:52 CEST, 14:52 UTC)», ha anunciado la ESA en una publicación en la red social X.
Dimorphos fue el satélite del sistema de asteroides binarios Didymos, el primer objeto del Sistema Solar cuya órbita fue modificada por la actividad humana. Ahora, como detalla la ESA, Hera realizará un estudio detallado tras el impacto.
El propósito es reunir datos cruciales que faltan sobre Dimorphos con el fin de conocer los límites de aplicación de la desviación cinética de asteroides, una técnica de defensa planetaria que la misión DART ha demostrado ser fiable.
El equipo de Ciencias Planetarias, que forma parte del grupo de investigación en Astronomía y Astrofísica de la Universidad de Alicante (UA), ha viajado a Cabo Cañaveral (Florida) para participar en el lanzamiento de la misión espacial Hera.
Adriano Campo Bagatin, de la UA, y Julia de León, del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), son los únicos investigadores pertenecientes a instituciones españolas de la treintena de científicos europeos que forman el equipo de la misión.
El equipo de Ciencias Planetarias de la UA participa desde el inicio de la misión en el estudio de la estructura interna de los asteroides Didymos y Dimorphos, que forman el sistema binario de asteroides cercanos a la Tierra objeto de la misión.
Además, se encargan del estudio de la evolución del material que pueda haberse lanzado al espacio por efecto de la colisión de DART, así como los efectos de la recaída de ese material en la superficie de ambos cuerpos.
«Llevamos años contribuyendo a los preparativos de esta misión, determinando, con los responsables de la parte de instrumentación, todo lo necesario para llevar a cabo las observaciones y mediciones. Aunque será solo el comienzo, si el lanzamiento se realiza con éxito, nos separan dos años de las primeras imágenes del asteroide que la sonda Hera enviará a la Tierra en 2026», han señalado los investigadores.
Los profesionales han agregado que la misión permitirá conocer exactamente los efectos de la colisión, lo que implica una «mejor información» sobre cómo preparar en el futuro «una misión para la desviación de cualquier asteroide que pudiera impactar en la Tierra».
«En el 2029, el asteroide Apophis, de unos 300 metros de tamaño, rozará el planeta Tierra a menos de 32.000 kilómetros de la superficie», ha asegurado el catedrático de la UA Adriano Campo Bagatin. «Las colisiones de asteroides pueden volver a ocurrir», ha concluido.
Los asteroides del tamaño de Dimorphos suponen un peligro para la vida en la Tierra en caso de colisionar con nuestro planeta, explicó vía correo electrónico a la agencia Efe Susana Infante, jefa de proyecto de Hera en Thales Alenia Space, empresa que desde España lideró el sistema de comunicaciones, que permite controlar la nave desde el centro de control durante todo el transcurso de la misión.
El efecto de tal impacto sería devastador si llegara a un área poblada, capaz de destruir una ciudad entera o de generar un tsunami si cayera en el mar, agrega la experta. Se calcula que hay unos 30.000 asteroides con tamaños entre los 100 y 300 metros y con órbitas cercanas -en términos astronómicos- a la Tierra (los llamados NEO).
La frecuencia de impacto de cuerpos de estas dimensiones con la Tierra es de aproximadamente una vez cada 10.000 años, detalla Infante: «Se estima que el 82 % de ellos no han sido detectados todavía, así que debemos permanecer en alerta y preparados para actuar en caso de necesidad».
«Hera es un complemento esencial a la misión DART de la NASA. Sabemos que DART consiguió modificar con éxito la órbita de Dimorphos alrededor de Didymos (...); sin embargo, los científicos necesitan información más detallada sobre Dimorphos para poder evaluar la eficiencia del impacto cinético como método de defensa planetaria».