Una niña de 8 años conduce el SUV de sus padres más de 20 kilómetros para ir a una tienda
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La policía consiguió localizar a la pequeña, desaparecida durante más de dos horas, tras la llamada de un conductor que alertó de la conducción temeraria de un Nissan Rogue blanco: «¡Parece una niña!»
19 sep 2024 . Actualizado a las 09:22 h.Una niña de 8 años de Ohio cogió sin permiso el coche de sus padres, un Nissan Rogue SUV, y lo condujo más de 21 kilómetros para ir a un centro comercial, donde fue localizada por la policía cuando estaba ya comprando. Por suerte, no hubo que lamentar más daños que un buzón que la pequeña se llevó por delante en su irregular conducción, según le confesó ella misma a los agentes.
La familia de la niña, residente en la localidad de Bedford, había denunciado su desaparición en el teléfono de emergencias poco antes de las 9 de la mañana de este pasado domingo. Según explicaron, llevaban dos horas sin saber nada de ella.
Sus vecinos les dieron la primera pista a través de una grabación de la cámara de seguridad exterior. A eso de las 7 de la mañana, la niña había cogido sin permiso el SUV familiar y se había alejado de su vivienda conduciendo.
La policía se puso enseguida manos a la obra para dar con el paradero de la niña, aunque no lo tuvieron complicado. Poco después de comenzar la investigación, los teléfonos empezaron a sonar. Eran varios conductores, que informaban de un coche que conducía de manera irregular, temeraria y haciendo eses en algún momento.
Uno de ellos llegó incluso a grabar las maniobras del Nissan desde una cámara de seguridad de su coche. «¡Parece una niña!», se le escucha gritar al conductor, al teléfono con la policía, al ponerse a la altura en la carretera de la pequeña al volante.
Las pistas de los diferentes testigos hicieron que los agentes dieran por fin con el paradero de la niña. Estaba a 21 kilómetros de su casa, en un centro comercial Target, sana y salva, y ya paseándose por la tienda y metiendo productos en el carrito como una clienta más.
Por supuesto, no condujo el camino de vuelta a casa. La familia de la pequeña acudió al comercio para reencontrarse con la niña y tomar los mandos del SUV familiar.
Según confirmaron los agentes, la precoz conductora no se enfrentará a cargos criminales, ya que es demasiado pequeña para tener responsabilidad penal. Todo ha quedado, por suerte, en una feliz anécdota con solo un buzón de correos por lamentar.