Una herramienta desarrollada por Mozilla, los creadores del navegador Firefox, ayuda a evitar estafas, falsificaciones y notas infladas. ¿Es creíble que casi todas las mercancías online tengan notas de cuatro o cinco estrellas?
02 sep 2024 . Actualizado a las 14:09 h.Cuando un usuario quiere adquirir un producto en internet, suele buscar información de otras personas que ya lo han probado. Si es concienzudo, se fijará en los detalles de las opiniones de otros consumidores. Si no, simplemente mirará las estrellas.
Muchas valoraciones de cuatro o cinco equivalen a notable o sobresaliente. En muchos casos garantizan la calidad de la posible adquisición, pero las reseñas falsas son una de las grandes plagas de la Red. Y en muchos casos las notas están infladas.
Ocho de cada diez consumidores se han topado en internet con una reseña falsa, según el Local Consumer Review Survey que elabora la web especializada www.brightlocal.com. No es un problema menor. Amazon y la OCU se aliaron en su día para conseguir el cierre de un grupo de Telegram llamado «Productos gratis», que promovía opiniones inventadas y calificaciones infladas de cinco estrellas a cambio de recibir compensaciones económicas en forma de reembolso del dinero de los artículos que compraban.
¿Cómo lo consiguieron? Pues con una demanda contra los administradores del grupo y enviando un requerimiento a la plataforma de Pável Dúrov, recientemente detenido en Francia por su responsabilidad en posibles delitos cometidos a través de Telegram y por su negativa a comunicarlos a las las autoridades.
La empresa fundada por Jeff Bezos lleva años luchando contra el mercado negro de las reseñas falsas. Según el portal AboutAmazon, sus acciones legales provocaron el cierre de hasta siete webs en España el año pasado. No solo actúa en los juzgados -en España las reseñas están reguladas por la la Ley General para Defensa de los Consumidores y la Ley de Competencia Desleal-, también realiza cribados en su plataforma -llegó a eliminar marcas que fomentaban el fraude- y mejoras tecnológicas para evitar engaños.
Otros gigantes del comercio electrónico mantienen cruzadas similares. Cuentan con sistemas que emplean inteligencia artificial para detectar trampas. ¿Qué puede hacer un usuario particular para protegerse y que no le den gato por liebre? Tiene varias herramientas independientes y gratuitas a su disposición.
Una con excelente reputación es Fakespot, de Mozilla, los creadores del prestigioso navegador Firefox. Tiene millones de usuarios y está disponible en dos formatos, como extensión de navegador (hay varias versiones para los más populares, Chrome, Firefox y Safari) y como aplicación para móvil (Android e iOS). Entre las dos, tiene millones de usuarios satisfechos, según sus creadores.
¿Cómo funciona? Emplea algoritmos e inteligencia artificial para intentar esclarecer la veracidad de las reseñas. Y las clasifica con un sistema de letras, de la A (las más confiables) a la F (habría que huir). También ahorra tiempo y esfuerzo al consumidor al destacar las opiniones con mejor cualificación, evitándole leer las poco relevantes o las sospechosas de fraude. Para que pueda hacer su trabajo, hay que permitirle cosechar datos de la navegación. Si no se quiere otorgar ese permiso, es mejor olvidarse del tema.
Fakespot trabaja de forma automática, con los datos que ya tiene escaneados, pero también puedes decirle que investigue productos nuevos en Amazon, Best Buy, eBay, Sephora, Walmart o Shopify. En mi experiencia, buscando unos auriculares inalámbricos deportivos con cancelación de ruido de una marca bastante conocida en Amazon, Anker, le dio una valoración positiva. De C al vendedor y de B al conjunto de opiniones. Las 1.200 reseñas eran en general bastante ajustadas. Y no había patrones de fraude.
Hay una tercera forma de usar Fakespot sin instalar una extensión de navegador o sin descargar la aplicación. En la web, a través de un servicio llamado Analyzer, se puede introducir una url de las tiendas indicadas y obtener la valoración del vendedor y el producto.