Detenido un hombre que quería exportar a Milán un cuadro falso de Leonardo Da Vinci

Redacción REDACCIÓN/LA VOZ

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El acusado afirmaba que su precio era de 1,3 millones de euros, pero El Prado aseguró que no llegaba a los 5.000

13 ago 2024 . Actualizado a las 13:38 h.

La Policía Nacional, en colaboración con la francesa, detuvieron y acusaron de contrabando a un hombre que quería exportar ilegalmente un cuadro que atribuía a Leonardo da Vinci.Esto sucedió tras detectar un «correo» que transportaba la imitación con un permiso de exportación caducado. El acusado tenía la intención de venderlo fuera de España, y aseguraba que su precio era de 1,3 millones de euros.Sin embargo, El Prado certificó que la «imitación fraudulenta» que se pretendía vender en Milán no llegaba a los 5.000 euros.

En el puesto fronterizo de Modane, en Francia, interceptaron el vehículo en el cual viajaba la obra. En el permiso de exportación caducado constaba, según la catalogación realizada por el solicitante y los datos que aportó él, que había sido realizado por Leonardo da Vinci, que su título era Retrato Giacomo Trivultio, que su valor alcanzaba los 1,3 millones de euros, y que su destino era Milán.

El cuadro fue trasladado al Museo del Prado, y tras un análisis y estudio técnico, los expertos afirmaron que se trataba de un fraude, y que no fue creado por Leonardo ni por cualquiera de los maestros italianos de su época. Los expertos confirmaron que la obra era «una imitación de los modelos de retratos milaneses de finales del siglo XV y principios del siglo XVI» y que había sido realizada «con intención fraudulenta, probablemente a principios del siglo XX». Situaron su valor real entre 3.000 y 5.000 euros.

Por otro lado, ya que el permiso de exportación que acompañaba la pintura era auténtico, pero estaba caducada desde hacía ya varios meses, la salida de España del falso Leonardo se convirtió en exportación ilegal.

 La investigación que permitió detener en Madrid al hombre que movía la obra, como presunto autor de un delito de contrabando, comenzó en julio del 2022, cuando los agentes supieron que el servicio aduanero francés había localizado una obra que estaba siendo exportada desde España.