Es la primera reconciliación entre las partes desde el golpe en Gaza del 2007
24 jul 2024 . Actualizado a las 19:56 h.Tras casi nueve meses de guerra y años de enfrentamientos internos, hasta 14 facciones políticas de Palestina decidieron ayer arrancar un proceso de reconciliación por el que se perseguirá un Gobierno de unidad para frenar las agresiones sobre la población gazatí y la «ocupación» ilegal israelí de territorios en Cisjordania y Jerusalén este gracias a la mediación de China, que anota otro tanto exitoso en su campaña de acciones diplomáticas encaminadas a la paz.
El documento, alumbrado tras tres días de negociación en Pekín, suscribe un inicio de acuerdo para configurar un «Gobierno de unidad» que englobe a movimientos como Fatah, que se hace cargo de la Autoridad Nacional de Palestina (ANP) en Cisjordania, Hamás, que gobierna de facto en Gaza, Yihad Islámica y otras organizaciones de corte socialista o islamista como el Frente Popular para la Liberación de Palestina (PFLP) y el Frente Democrático para la Liberación de Palestina (DFLP). Como piedra angular del acuerdo, las distintas partes reivindicaron que el objetivo prioritario es la creación «de un Estado palestino independiente» según las resoluciones 181 y 2334 de la ONU, que señalan que la región debe partirse en un Estado árabe, otro judío y otra parte bajo administración internacional, además de declarar ilegales las ocupaciones de los territorios palestinos.
Reconciliación y condenas
Hamás y Fatah, junto al resto de facciones palestinas, estaban enfrentadas desde el 2007, año en el que el Movimiento de Resistencia Islámica echó por la fuerza a su contraparte del Gobierno de Gaza. Este acuerdo abre las puertas a un ecosistema político palestino unificado hasta, por lo menos, la convocatoria de unas nuevas elecciones tras la invasión israelí de la Franja de Gaza.
El papel que jueguen China y otros mediadores propalestinos —Egipto y Catar— en este tablero será crucial para que la administración de los territorios palestinos por las autoridades árabes locales y el freno a los asentamientos ilegales sean una realidad. El portavoz de Exteriores chino, Bi Haibo, señaló que «cuando otros países añaden leña al fuego, nosotros hacemos todo lo posible por lograr la paz». El ministro de Exteriores israelí, Israel Katz, aseguró que la unidad no se consumará «porque Hamás será aplastado y Mahmud Abás [presidente de la ANP] observará Gaza desde muy lejos».