Trump, en su primer mitin tras el intento de asesinato: «Me llevé un balazo por la democracia»
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El expresidente y candidato republicano endureció el tono de su discurso y bromeó sobre la debilidad de Biden: «Este es un hombre enfermo, débil y patético que no puede presentarse a unas elecciones»
21 jul 2024 . Actualizado a las 13:51 h.El expresidente y candidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, bromeó sobre la debilidad política de su rival, Joe Biden, en un mitin en Grand Rapids (Michigan), el primero tras su intento de asesinato de hace una semana.
Trump, que lucía un vendaje ligero y discreto en la oreja que resultó lesionada en el ataque, salió al escenario en un estadio repleto de seguidores entre gritos de «USA» y «¡Lucha!» y, tras agradecer el apoyo, empezó a lanzar dardos a su oponente a las elecciones.
Primero señaló que la campaña de Biden lo describe como una «amenaza para la democracia» y sentenció: «La semana pasada, me llevé un balazo por la democracia», y después se desligó del «Proyecto 2025» al que esta lo asocia, calificando a sus creadores de «derecha radical» y «extremista». Pasó entonces a proponer una encuesta sobre qué candidato demócrata es «mejor si queremos ganar»: el nombre de la vicepresidente Kamala Harris fue recibida con abucheos, y el del presidente Biden con vítores. «No creo que tengamos que ir mucho más lejos», apostilló.
«En este mismo momento, los jefes del Partido Demócrata están frenéticamente intentando derribar los resultados de las primarias de su propio partido para sacar a Joe Biden de las papeletas», comentó, mofándose más tarde de que el partido «no tiene ni idea de quién es su candidato».
También capitalizó la débil actuación de su oponente en el debate de finales de junio, tras el cual empezaron las presiones de líderes demócratas para que Biden abandone la carrera presidencial: «¿Quién ganó el debate, Biden o Trump?», preguntó, suscitando gritos con su apellido. «Este es un hombre enfermo, débil y patético que no puede presentarse a unas elecciones», declaró con dureza. «Cuando voten por Biden, probablemente estén votando indirectamente a Harris, de todas formas», agregó el expresidente, que aprovechó para repetir sus denuncias infundadas de fraude electoral o «trampas» en las anteriores elecciones que perdió frente a Biden.
Trump, con un tono distendido y visiblemente cómodo, retomó buena parte de los puntos de campaña que enarboló en su discurso de aceptación de la nominación republicana esta semana, incidiendo en puntos como el control de la inmigración ilegal y «recortes fiscales adicionales».
Biden se mantiene firme pese al auge de la oposición en los demócratas
El presidente de EE.UU. recibe este miércoles a Benjamin Netanyahu
Miguel Palacio, E. La Voz
La rebelión interna del Partido Demócrata contra la candidatura de Joe Biden a la reelección sigue ganando adeptos. El número de demócratas que han pedido abiertamente la renuncia del candidato aumenta, mientras desde la campaña del presidente de mantiene que su intención es la de llegar al final del proceso electoral.
Además de los movimientos en la sombra de algunos líderes históricos del partido como la exspeaker, Nancy Pelosi, y el expresidente, Barack Obama, el número de demócratas que han pedido públicamente a Biden que reconsidere su intención de mantenerse en la competición continúa en aumento.
El viernes, el legislador demócrata por Illinois, Sean Casten, publicaba una carta abierta a Biden en el Chicago Tribune en la que pedía que el presidente de un paso al lado para «entregar la antorcha a una nueva generación». Con todo, las llamadas —por lo menos aquellas que se han hecho en público— a la retirada de Biden por parte de miembros de su partido siguen arrojando un saldo mínimo. Ayer, habían sido un total de 37 los demócratas (33 representantes y 4 senadores) que han manifestado abiertamente estar a favor de la retirada del presidente. Un número que si bien no es despreciable, aún representa una minoría del total de 263 demócratas— entre los que hay cuatro independientes que forman parte de la conferencia demócrata— con cargo legislativo en alguna de las dos cámaras.
Además, el partido demócrata parece estar dividido en torno a dos ejes. Por un lado, están aquellos representantes y senadores que, de cara a noviembre, enfrentan reelecciones competidas y que perciben la candidatura de Biden como una amenaza a los resultados del partido demócrata en todas las carreras electorales abiertas. Sería el caso de demócratas como Marie Gluesenkamp Perez, representante por el estado de Washington, o de Gabe Vasquez, representante por el estado de Nuevo México, cuyos escaños estarían en seria disputa según afirma el estudio Cook Political Report.
Por otro lado, hay una división ideológica. Los demócratas más a la izquierda del espectro político parecen convencidos de que Biden es el candidato que mejor responderá a sus aspiraciones y de ahí que dirigentes como el independiente por Vermont, Bernie Sanders, y la representante del Bronx, Alexandria Ocasio-Cortez, se hayan pronunciado a favor del candidato.
«Tiene ganas» de volver
Frente a las críticas, la campaña del presidente sigue afirmando que el candidato está dispuesto a llegar hasta el final de la carrera electoral. En un comunicado, el presidente remarcó que «tiene ganas» de volver a la carretera para seguir haciendo campaña. Además, Biden —que se encuentra haciendo cuarentena en su casa de Rehoboth Beach en Delaware tras contraer el covid— tiene eventos planeados en Georgia y Texas en los próximos días. Por su lado, una de las directoras de su campaña, Jen O´Malley Dillon, ha pedido a los participantes de la intentona presidencial del mandatario que hagan oídos sordos a las informaciones que sopesan la posibilidad de una retirada.
Una de las razones que podría estar detrás de la renuencia de Biden a abandonar podría ser una mera cuestión de tiempos políticos. El demócrata podría tener los ojos puestos en la próxima visita del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a Washington, prevista para la semana que viene. Biden, que ha chocado frecuentemente con Netanyahu desde el inicio de la invasión israelí de la Franja de Gaza, querría evitar presentar su renuncia antes de que el mandatario se presente ante el Congreso de EE.UU. el miércoles.