El transporte supera el caos informático mientras palía los retrasos acumulados
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Miles de viajeros seguían ayer en tránsito para poder llegar a sus destinos
21 jul 2024 . Actualizado a las 12:08 h.Los aeropuertos españoles, y en general los de todo el mundo, operaron ayer con normalidad después de recuperarse de los estragos vividos en la víspera por un fallo global en el sistema operativo de Microsoft que se desencadenó tras la actualización de un componente de ciberseguridad de la empresa Crowdstrike.
De este modo, en caso de registrarse algún retraso o cancelación, sería competencia de las aerolíneas y no de Aena, según han explicado a Efe fuentes del gestor aeroportuario, que dio cuenta de unas 400 cancelaciones, el 6,5 % de los vuelos programados. Unos problemas pese a los que recibió la felicitación del ministro de Transportes, Óscar Puente, por superar esta crisis «con el menor nivel de incidencias posible». «Enhorabuena a Aena y a todo el personal de la compañía por haber hecho posible una operativa cercana a la normalidad en circunstancias tan difíciles», escribió en su cuenta de X (antes Twitter).
Pese a que todavía hay muchos miles de viajeros en tránsito debido a las cancelaciones y los retrasos sufridos, también en los aeropuertos gallegos, ayer se podía constar el regreso a la actividad cotidiana. El Rosalía de Castro de Santiago recuperó la normalidad y la terminal ofrecía una imagen de total calma tras el caos sufrido el viernes, cuando de un total de 34 conexiones aéreas, 23 registraron retrasos y dos fueron canceladas, ambas de la compañía Vueling, con Londres (Gatwick) y Zúrich.
No obstante, numerosos pasajeros que se quedaron colgados estaban ayer todavía buscando soluciones. Es el caso de María José Salgado, vecina de Santiso, que no pudo volver a casa en un avión de Vueling que debía llegar desde Londres a las 23.50 horas, al ser anulado su vuelo cuando ya estaba a punto de embarcar. Como al resto de los viajeros, la aerolínea le dijo que tenía que buscar por su cuenta el alojamiento para pasar la noche y que le reembolsarían el coste del hotel, sin ofrecerle más opciones de vuelo de retorno que hacerlo vía Barcelona el próximo jueves, día 25. Debido a que tiene urgencia para regresar, no le quedó más remedio que moverse por su cuenta para encontrar alternativa y finalmente pudo comprar un billete para retornar este domingo, y reclamará el reembolso el importe.
A medida que pasan las horas, también está más claro que el fallo —calificado por el experto en ciberseguridad Troy Hunt como «el mayor apagón informático de la historia»— se debió a que la última actualización de controladores de la herramienta Falcon de CrowdStrike contenía errores. Inmediatamente colapsó Azure, la plataforma de computación en la nube de Microsoft y eso dejó fuera de servicio a multitud de equipos, obligando a reiniciarlos manualmente.
La Asociación de Consumidores reclamará daños pese a ser un caso de fuerza mayor
La Asociación Española de Consumidores (Asescon) reclamará los perjuicios ocasionados a los consumidores por el fallo informático de este viernes en los sistemas de Microsoft a raíz de la actualización de un componente de ciberseguridad de la empresa Crowdstrike.
«Independientemente de la culpabilidad o no de lo producido, las empresas deben indemnizar por los perjuicios ocasionados», subraya Asescon en un comunicado, en el que asegura haber recibido centenares de consultas.
Según la asociación, el consumidor tiene derecho a que se le abonen los posibles gastos extraordinarios en los que haya tenido que incurrir por los retrasos y cancelaciones de vuelos. Igualmente, añade, si hubiera algún tipo de problema o daño económico derivado de las incidencias en los sistemas de pago, podrían reclamarse.
Fuerza mayor
Plataformas de reclamación como Reclamador.es o Airhelp han coincidido en que los retrasos de los vuelos producidos este viernes en los aeropuertos de Aena por la caída de Microsoft son considerados de fuerza mayor, por lo que no se podrían solicitar reembolsos, mientras que desde Facua han indicado que los afectados tienen derecho a comida y alojamiento en hotel.