Javier Madejón, vicedecano del Colegio Oficial de Pilotos: «El aumento de turbulencias es proporcional al número de vuelos; hay más y, por tanto, más posibilidades de incidentes»
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Desde su institución recalcan la importancia de utilizar el cinturón de seguridad durante todo el vuelo, incluso si la señal está apagada. Los pilotos, dice, van atados en todo momento. El marinero gallego que iba en el avión desviado podría regresar a casa esta semana
03 jul 2024 . Actualizado a las 09:56 h.El comandante de línea aérea y vicedecano del Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial, Javier Madejón, explica lo que pudo suceder y el protocolo habitual ante las turbulencias.
—En los últimos meses, tres vuelos han sufrido fuertes turbulencias con heridos. ¿Hay más turbulencias ahora que antes?
—No es que ahora haya más. El aumento de turbulencias es proporcional al número de vuelos que se hacen. Hay muchas más rutas y vuelos que antes, por lo que se pasa por nuevas zonas también y, por tanto, más posibilidades de que haya turbulencias.
—¿Qué pudo suceder en esta ocasión con el vuelo de Air Europa?
—Imagino, aunque quien lo dirá seguro será la investigación oficial, que fueron sorprendidos por una turbulencia severa en aire claro. Un piloto siempre va a evitar meterse en una zona de turbulencias, pero estas no se pueden predecir. Además, en la ruta de Madrid a Montevideo se debe atravesar el Frente intertropical, una zona tormentosa por la cantidad de humedad del mar y el calor. Es una zona de tormentas mucho más altas y anchas, ya que la troposfera (donde se producen la mayoría de fenómenos meteorológicos) es más alta en el ecuador. A veces, para evitar una tormenta supone desvíos de casi 200 millas (unos 322 kilómetros).
—¿Cómo de importante es el cinturón en esta situación?
—Seguramente la mayor parte de los heridos en este vuelo no tenían el cinturón. Aunque se quite la señal de cinturón no significa que debas sacártelo. No significa que estés atado hasta que te quite la respiración, pero deberías quitártelo para ir al baño o coger algo de la maleta, por ejemplo, y volvértelo a poner. Nosotros, los pilotos, siempre vamos atados.
—¿Cual es el protocolo al acercarse a una zona de turbulencias?
—Lo primero es reducir la velocidad y preguntar a control si hay posibilidad de cambiar de nivel para evitar la zona lo máximo posible. Atravesar una zona de turbulencias es como atravesar un bache con el coche, si lo haces despacio y no por la parte más severa, mejor. Se pone la señal de cinturones y se notifica a la tripulación de cabina que aseguren cualquier elemento suelto como los carros de comida. Se obliga a todos a sentarse y la tripulación también se ata.
—¿Qué sucede si hay heridos?
—Primero preguntamos si hay algún médico, que suele haber en casi todos los vuelos, para que evalúe el estado del herido. En función de la seguridad del paciente y del resto del pasaje, consideramos la mejor actuación, que a veces no es aterrizar en el aeropuerto más cercano. Todo esto en un margen muy corto de tiempo. En este vuelo, seguramente por el número de heridos, decidieron aterrizar en Natal.