El aceite de oliva se suma al IVA cero tras triplicar su precio en tres años

Ana Balseiro
ana balseiro MADRID | LA VOZ

ACTUALIDAD

La medida del Gobierno quiere proteger e incentivar el consumo de este producto, ahora considerado de primera necesidad

22 jun 2024 . Actualizado a las 13:39 h.

El aceite de oliva se incorporará a la cesta de productos con IVA cero, por estar considerados de primera necesidad. El Gobierno lo aprobará el próximo martes en el Consejo de Ministros, atendiendo a la meteórica subida del precio de este oro líquido, ya rebautizado así también por su coste y no únicamente por sus propiedades beneficiosas para la salud, como pilar de las dietas mediterránea y atlántica. Y es que el litro de aceite ha triplicado su precio desde enero del 2021, escalando más de un 60 % en el último año, según se recoge en los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

El néctar de la aceituna no baja de los 9 euros en los lineales de los supermercados, y si el consumidor opta por el virgen extra el precio sube aún más, hasta los 13,60 euros de media por litro, según señala la organización de consumidores Facua, que denuncia también que tras el rali de precios está la especulación, ya que en España su coste prácticamente dobla al del mismo producto en los supermercados de la vecina Francia.

En cualquier caso, según adelantó este viernes la Cadena SER y confirmó el Ministerio de Hacienda, el Gobierno ha decidido suprimir el IVA del aceite de oliva, que hasta ahora formaba parte de los productos de alimentación con este impuesto al 5 % (desde el tipo reducido del 10 %) de forma extraordinaria y transitoria, mientras persisten las tensiones inflacionistas.

De hecho, el alivio fiscal en la cesta de la compra, que también se extiende a otros productos de primera necesidad —desde el pan a la leche, los huevos, las frutas y las verduras o las legumbres—, expiraba el próximo 30 de junio, pero el presidente del Gobierno avanzó que llevará al Congreso próximamente la propuesta de prorrogarlo el resto del año, puesto que su encarecimiento no ha cedido.

La mayor subida alimentaria

Y es que así lo refleja mes tras mes el INE en cada actualización del índice de precios de consumo (IPC). Como muestra el gráfico que acompaña a la información, desde el 2021, antes del estallido de la guerra de Ucrania y el recrudecimiento de la escalada de precios, el aceite de oliva ha sido el producto que más se ha encarecido, llegando a multiplicar por varios dígitos los incrementos de otros alimentos, como el pan, la leche o las verduras.

En los últimos tres años se ha disparado más del 200 %. La escalada de los últimos meses es elocuente, ya que muestra una subida de precios interanual de entre el 50 y el 70 %. Hay que remontarse a marzo del 2021 para encontrar el punto de inflexión en su precio, que entonces retrocedía un 0,8 % interanual. Desde ese momento comenzó a encadenar alzas cada vez más abultadas. Hasta la actualidad.

Precisamente eso ha hecho que el Ejecutivo tome cartas en el asunto y que, a partir de ahora, y de modo definitivo, este oro líquido mediterráneo —y atlántico— pase a considerarse producto de primera necesidad y, en consecuencia, a estar sujeto al tipo superreducido del IVA, que habitualmente es del 4 %. Sin embargo, el paquete de medidas anticrisis adoptado por el Gobierno el año pasado lo rebajó temporalmente al 0 % desde el 10 % (tipo reducido) que se le aplicaba entonces.

Cuando la evolución de los precios recupere la normalidad, el IVA del aceite de oliva será del 4 % y no del 10 %, una medida que desde Hacienda justifican como necesaria para «proteger e incentivar su consumo, un producto saludable y cuyo precio se ha encarecido recientemente como consecuencia, entre otros motivos, de la sequía».

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, calificó la medida de «muy positiva» para los hogares, que «han demostrado su fidelidad» a este aceite pese a su intenso encarecimiento. Recordó que los españoles consumen de media 6 litros per cápita al año, mientras que el promedio mundial está en 0,4 litros.

El sector considera que la medida es «un balón de oxígeno» y augura una bajada de precios a final de año

M. ALFONSO

El sector ha recibido con los brazos abiertos el anuncio del Ministerio de Agricultura de eliminar el IVA del aceite. «Es un balón de oxígeno para que el consumidor nos pueda seguir comprando a pesar de que los precios estén altos», asegura Teresa Pérez, gerente de la Interprofesional del Aceite de Oliva Español. También augura que, en vista de las previsiones de la próxima campaña, el coste de este producto comenzará a bajar en los próximos meses, aunque no se prevé que ese descenso llegue al supermercado hasta finales de año.

«Es una medida que permitirá seguir manteniendo el consumo y viene a aliviar un poco la situación hasta que llegue la próxima cosecha», afirma Pérez. Reconoce que, tras el alza de los precios, se ha registrado una caída de hasta el 24 % en las compras de oro líquido. «Pero era algo inevitable, porque no hay producto».

En aceites Abril también ven con buenos ojos «este alivio fiscal para una pieza clave de la dieta mediterránea», en palabras de Elena Pérez, su directora de márketing. Recuerda que, según los datos de la Asociación Nacional de Envasadores de Aceite, el consumo nacional de aceite de oliva virgen extra ha caído un 30 %, algo que han notado también en su empresa. «El consumo se estaba yendo a los aceites de semillas, nosotros notamos caída pero la hemos compensado con el aumento de los aceites de semillas», afirma. Y está de acuerdo en que, entre la eliminación del IVA y las previsiones de la próxima campaña «el precio va a ir a la baja hasta noviembre». «Calculamos que puede descender hasta un 40 %», asegura.

Entre los productores gallegos reconocen que la medida «vai axudar a que os prezos sexan máis competitivos», afirma Alfonso Rodríguez, presidente de la Asociación de Productores de Aceite y de Aceituna de Galicia. Pero recuerda que los aceites

100 % gallegos tienen unos precios diferentes. «Partimos dunha posición elevada porque o noso é un sector gourmet con prezos específicos», explica. Así el precio de estos aceites apenas se ha visto incrementado en los últimos tiempos. «Se está vendendo o medio litro a entre 18 e 30 euros e non houbo baixadas nin subidas porque so producimos 18.000 litros ao ano», concluye.

Decepción en la cadena pesquera al quedar al margen de nuevo: «Seguiremos insistiendo»

La reticencia del Ejecutivo a extender a los productos del mar y a las conservas de pescados y mariscos las rebajas fiscales que sí se aplican a otros alimentos empieza a percibirse casi como ofensivo en la cadena de la pesca. A estos alimentos se les sigue aplicando un IVA del 10 % cuando a otros se le ha rebajado al 4 % e incluso retirado del todo, como es el caso del pan, la leche, frutas o verduras.

«El sector pesquero está muy decepcionado por la decisión del Gobierno de no incluir a los productos pesqueros entre los alimentos a los que no se le va a aplicar el IVA», trasladaba este viernes Javier Garat, secretario general de Cepesca, en A Coruña, donde el también presidente de Pesca España participaba en una jornada de lucha contra la pesca ilegal. La de retirar el gravamen a los alimentos de la pesca, el marisqueo y la acuicultura «es una reclamación que llevamos realizando desde hace muchos años y, para nosotros, es incomprensible que no se acepte nuestra petición», añadió. Porque «si el Gobierno quiere realmente apostar por una alimentación saludable, debería también hacerlo aplicando una fiscalidad saludable a los productos pesqueros, la proteína animal más saludable y con menor huella de carbono».

En similar sentido se pronunció Sergio López, gerente de la Organización de Productores Pesqueros (OPP) de Burela, en la misma jornada, donde recordó que por los beneficios que reporta «todos deberían comer pescado» y su ingesta, además, «tendría que estar bonificada», ya no solo para apoyar a un sector que cuando había pandemia, se consideró esencial.

Ahora bien, la negativa no les amilana: «Seguiremos insistiendo toda la cadena de valor unida», sentenció Garat.