Meloni reclama su papel de líder para dar un giro hacia la derecha a la UE
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La primera ministra de Italia, la dirigente que sale más reforzada en las europeas, reivindica su papel en Bruselas tras la debacle en el eje franco-alemán
11 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, comenzó este lunes a poner sobre la mesa su visión sobre la Unión Europea de los próximos cinco años. Reforzada por los buenos resultados de su partido, el ultraderechista Hermanos de Italia (HdI), Meloni reivindicó su papel de líder en la UE y como tal su derecho a «transformar» las políticas europeas. «Se impone que Europa mire más a la derecha», dijo en una entrevista a la radio RTL.
No es algo sorprendente. Meloni basó su campaña electoral en una crítica pragmática, un enfoque que le permitiera criticar a Bruselas complaciendo a su electorado sin empañar la reputación de líder de derechas proeuropea que se ha labrado desde que fue elegida en el 2022. Según fuentes de HdI, el desgaste del presidente Emmanuel Macron y del canciller Olaf Scholz debería frenar la hegemonía del eje París-Berlín, dando más espacio a la «nueva Europa» [empezando por Polonia) y, sobre todo, a Italia.
Por pragmatismo, Meloni se inclina por seguir presidiendo el grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), la cuarta fuerza de la Eurocámara, y en apoyar la reelección de Ursula von der Leyen al frente de la Comisión Europea, aunque durante la entrevista con RTL dijo que «todavía es pronto para hablar de ello».
La cuestión ahora será conocer qué relación quiere mantener Meloni con Marine Le Pen, la líder del ultraderecha francesa, que en el Parlamento Europeo pertenece al grupo Identidad y Democracia (ID), junto con la Liga italiana. Históricamente más cercana al partido de Matteo Salvini, en los últimos meses Le Pen ha ido estrechando lazos con Meloni, llegando a invitarla a unir fuerzas pocos días antes de la cita electoral.
Lo que está claro es que el resultado de Meloni (un 28,8 % de los votos, cerca de tres puntos más que en las legislativas del 2022) es una excepción respecto a los varapalos sufridos por los partidos de Gobierno de otros grandes países, como Francia y Alemania. Por eso, la intención de Meloni es tener un papel clave en la UE y, según los medios italianos, es probable que decida unirse a conservadores, socialdemócratas y liberales, aunque dejando la puerta abierta a votar cuestiones puntuales con los ultraderechistas de ID.
Más fuerte que Salvini
El triunfo de HdI también confirma el liderazgo a nivel de nacional de Meloni en detrimento de Salvini, su ministro de Transportes.
El apoyo a Von der Leyen probablemente aumentará la distancia entre Meloni y Salvini, que ha expresado en repetidas ocasiones su hostilidad hacia la presidenta saliente de la Comisión. Pero el peso del líder de la Liga en el actual Gobierno está condenado a reducirse, al reunir solo un 9 % de los votos y al haber sido superado por el otro socio de Gobierno, el liberal y proeuropeo Forza Italia (FI), que con el 9,6 % es la cuarta fuerza política de Italia. Un éxito personal para su secretario, Antonio Tajani, que desmintió a quienes temían la desintegración del partido tras la muerte de su fundador, Silvio Berlusconi, hace un año.
Los más de 5,5 millones de votos (24,1 %) recibidos por el Partido Demócrata (PD), liderado por Elly Schlein, le convierten en la primera fuerza del grupo europeo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (S&D) al ganar 21 escaños, en el que, al igual que el PSOE (con 20), tendrá más peso que los socialdemócratas alemanes. «No hay mayoría posible sin el grupo de S&D. Y estamos decididos a hacer valer todo nuestro peso», afirmó Schlein.
La participación se situó por debajo del 50 %.