Tres detenidos por amenazar e insultar a los acampados por Palestina en la Complutense

La Voz REDACCIÓN

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Acampada en la Universidad Complutense de Madrid.
Acampada en la Universidad Complutense de Madrid. Susana Vera | REUTERS

Los estudiantes de la Universidad Jaime I de Castellón tratan de impedir la reunión del Consejo de Rectorado

27 may 2024 . Actualizado a las 10:47 h.

La Policía Nacional ha detenido a tres personas, de entre 18 y 21 años, por, supuestamente, amenazar e insultar, lanzando proclamas de índole nazi, a los acampados por Palestina en la Universidad Complutense de Madrid (UCM).

Ocurrió la noche de este sábado, sobre las 22.30 horas, cuando un grupo de unas ocho personas acudieron a la universidad y comenzaron a increpar a los presentes, según ha informado El País y han confirmado a Efe fuentes policiales. También les amenazaron y cantaron diversas proclamas de carácter nazi aunque no llegaron a agredir a nadie y no hubo heridos.

Tras recibir el aviso, los agentes se personaron en el campus, donde hay cerca de 240 tiendas de campaña desplegadas en señal de protesta por la ofensiva israelí sobre Gaza y para exigir a los rectorados la ruptura de relaciones con las instituciones universitarias del país hebreo. Poco después localizaron a tres de los supuestos miembros del grupo, todos ellos españoles, de 21, 19 y 18 años, que fueron arrestados por delitos de odio y amenazas.

No es el único incidente universitario de las últimas horas. En la mañana de este lunes, los estudiantes acampados en el campus de la Universidad Jaime I de Castellón también denunciaron «cargas» del cuerpo de seguridad del centro mientras trataban de impedir «pacíficamente» la reunión del Consejo de Rectorado.

«Hemos sufrido la represión de seguridad con empujones y golpes al querer entrar de manera no violenta para impedir la celebración del Consejo», denunció uno de los estudiantes a la Cadena Ser. El rectorado les habría propuesto una reunión esta mañana para relajar tensiones, ya que los estudiantes consiguieron entrar en el edificio, donde permanecen hasta ahora.

Los ataques en Rafah también llegaron a oídos de los jóvenes, que consideran que «un contexto de emergencia humanitaria diaria no parece suficiente para que la universidad pública reconozca que se está produciendo un genocidio».