Una vacuna personalizada de ARN reprograma el sistema inmune para atacar el cáncer cerebral más agresivo
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El ensayo se ha realizado solo en cuatro pacientes, pero los positivos resultados obtenidos permitirán ampliar el estudio
02 may 2024 . Actualizado a las 10:17 h.Se ha probado solo en cuatro pacientes, pero es la primera vez que una vacuna de ARN personalizada contra el cáncer cerebral más agresivo y letal, el glioblastoma, ha logrado activar el sistema inmunológico para atacar el tumor desde dentro. Esta estrategia ha desencadenado una fuerte respuesta inmune, según un se recoge en un estudio de investigadores de la Universidad de Florida que se acaba de publicar en la revista Cell. El primer autor es el español Héctor R. Méndez-Gómez.
La vacuna logró reprogramar el sistema inmunológico para atacar el cáncer y desarrollar una respuesta inmune tan solo dos días después de que fuera administrada. Los cuatro pacientes tratados, que estaban en fase terminal debido a su tumor extremadamente agresivo, fallecieron finalmente, pero el experimento logró prolongar su vida un 50 % más de lo esperado. Ninguno de ellos tenía opciones de tratamiento. Es un paso aún pequeño, pero esperanzador.
El ensayo clínico en fase inicial se llevó a cabo después de los satisfactorios resultados obtenidos en una prueba previa que se llevó a cabo con diez perros que padecían tumores cerebrales naturales y cuya participación en el estudio fue aprobada por sus dueños. La innovadora terapia se había empleado previamente en ratones.
El siguiente paso, para el que tendrá que dar su aprobación la FDA de Estados Unidos, será un ensayo clínico de fase I ampliado, que incluirá hasta 25 pacientes adultos y pediátricos, con los que se pretende validar los hallazgos. Una vez que se confirme una dosis óptima y segura se espera pasar a una fase 2 con 25 niños. En los pequeños este tumor es especialmente letal, ya que no responden a los tratamientos que se utilizan para los adultos.
La nueva estrategia terapéutica representa una nueva forma potencial de reclutar el sistema inmunológico para combatir tumores resistentes al tratamiento. Para ello se emplea una combinación de la tecnología de ARN con el uso de nanopartículas lipídicas, empleadas para superar la barrera hematoencefálica y llevar el tratamiento al cerebro.
El concepto de la vacuna es similar a las utilizadas durante la pandemia de covid, pero con dos diferencias clave. Por un lado se emplean las propias células tumorales del paciente para crear una vacuna absolutamente personalizada y, por otro, se acompaña de un complejo mecanismo de administración diseñado específicamente para transportar el agente terapéutico al cerebro.
«En lugar de inyectar partículas individuales estamos inyectando grupos de partículas que se envuelven entre sí como cebollas, como una bolsa de cebollas», explicó el responsable del trabajo, Elias Sayour, oncólogo pediátrico del hospital de la Universidad de Florida. Al igual que otras inmunoterapias contra el cáncer, lo que se pretende es entrenar al sistema inmunológico para que reconozca a las células tumorales como algo extraño y lo ataque.
La nueva terapia, que se administra por vía intravenosa, estimuló una vigorosa respuesta del sistema inmunológico para combatir el cáncer. Y uno de los aspectos más sorprendentes es la rapidez con la que ha actuado. «En menos de 48 horas pudimos ver cómo estos tumores pasaban de lo que llamamos fríos -muy pocas células inmunitarias y respuesta muy silenciada- a una respuesta inmunitaria caliente y muy activa», advierte Sayour. «Esto -añade- fue muy sorprendente, dada la rapidez con la que sucedió».
A las cuatro personas que participaron en el ensayo se les extrajo ARN del tumor, algo así como la plantilla para empezar a trabajar, que se extirpó quirúrgicamente en cada uno de ellos. A partir de esta base se generó y amplificó el ARN mensajero, encargado de sintetizar las proteínas, y se envolvió en las partículas lípidas biocompatibles. De esta forma, cuando la terapia se inyecta en el torrente sanguíneo se consigue que las células tumorales parezcan un virus peligroso al que hay que atacar.
«La demostración de que fabricar una vacuna de ARN mensajero contra el cáncer de esta manera genera respuestas similares y fuertes en ratones y perros que han desarrollado cáncer espontáneamente y pacientes humanos con cáncer cerebral es un hallazgo realmente importante, porque, a menudo, no sabemos cómo de bien funcionan los ensayos preclínicos», destacó Duane Mitchell, director del Instituto de Ciencias Clínicas y Traslacionales de la Universidad de Florida y coautor del trabajo.
«Si bien -añadió- las vacunas y terapias de ARNm son ciertamente un tema candente desde la pandemia de covid, esta es una forma novedosa y única de administrar el ARN para generar respuestas inmunes realmente significativas y rápidas que estamos viendo en animales y humanos»
El glioblastoma se encuentra entre los diagnósticos más devastadores, con una mediana de supervivencia de alrededor de 15 meses
El avance significa que los científicos ahora podrán probar la vacuna en un grupo más grande de pacientes con cáncer cerebral. Se reclutará a unas 24 personas para la siguiente parte del ensayo.
Una nueva vacuna personalizada contra el cáncer de cerebro puede hacer que el propio sistema inmunológico del cuerpo ataque la forma más letal y agresiva de la enfermedad, sugieren los primeros estudios.
El primer ensayo en humanos de la vacuna de ARNm, probado en solo cuatro pacientes, encontró que desencadena una fuerte respuesta inmune para combatir el glioblastoma maligno.