España, Reino Unido y Unión Europea logran avances significativos sobre Gibraltar y seguirán negociando

Pablo Medina MADRID / LA VOZ

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El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, antes de su reunión con el vicepresidente de la Comisión Europea, Maros Sefcovic.
El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, antes de su reunión con el vicepresidente de la Comisión Europea, Maros Sefcovic. OLIVIER HOSLET | EFE

El ministro de Exteriores se reunió este viernes con su homólogo británico, David Cameron, con el ministro principal del Peñón, Fabián Picardo, y con vicepresidente de la UE, Maros Sefcovic

15 may 2024 . Actualizado a las 15:31 h.

El futuro de las relaciones de Gibraltar con la Unión Europea se empieza a resolver. Ayer, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, confirmó «avances significativos» en las «líneas políticas generales» sobre el próximo tratado pactado con el Reino Unido sobre el Peñón en una reunión presidida por la Comisión Europea sin que ni él ni sus contrapartes británica —David Cameron— y gibraltareña —Fabian Picardo— se atrevieran a poner fecha concreta para el acuerdo político final.

Las elecciones europeas están en el horizonte y las autoridades del Peñón, Reino Unido y España deben apretar el acelerador para antes de los comicios a fin de no paralizar las negociaciones y reiniciarlas con el nuevo Ejecutivo europeo. Albares se mostró optimista con el resultado del encuentro, que contó con el arbitraje del vicepresidente de la Comisión Europea, Maros Sefcovic. «Hoy no es un día más, no es un día de negociación más. Hoy ha sido un día muy importante, donde se han conseguido avances importantes y en el que todos estamos de acuerdo, una vez más, en las próximas semanas seguir trabajando para concluir», dijo el titular de Exteriores.

En una declaración conjunta, las tres partes negociadoras indicaron que la prioridad es, más que el tiempo, cerrar el escrito de un acuerdo «que asegure un futuro de prosperidad para toda la región» y que «traerá confianza, seguridad jurídica y estabilidad a las vidas y la calidad de vida de las personas de toda la región».

Limar los últimos detalles

Fuentes diplomáticas británicas citadas por varios medios aseguran que las autoridades de Gran Bretaña y Gibraltar están convencidas de que esta cita de alto nivel diplomático sembrará una buena cosecha para los implicados, pero también recordaron que se mantendrán «firmes» y «no se aceptará nada que comprometa la soberanía» del Peñón.

Los puntos que quedan por cerrar se centran sobre todo en el Campo de Gibraltar. Según estas mismas fuentes, los flecos más priorizados giran en torno a las funciones que tendrán tanto los cuerpos y fuerzas de seguridad españolas que controlan a los pasajeros de terceros países que acceden a Gibraltar, así como el de Frontex, la agencia europea encargada de vigilar las fronteras exteriores de la UE y el espacio Schengen, así como el control compartido del aeropuerto y la eliminación de la Verja para disponer un «área de prosperidad compartida».

También se quiere resolver la equiparación de las pensiones de los españoles que trabajaron en el Peñón con las de los gibraltareños, unos 450 euros superior, así como regular el IVA de productos como el tabaco, la gasolina o el alcohol.

Gibraltar, una colonia británica en el sur de España desde 1713, cuya soberanía este país reivindica de manera reiterada, se quedó fuera de los acuerdos sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), que se hizo efectiva el 31 de diciembre del 2020, y las tres partes implicadas aún mantienen las negociaciones.