Évole enfrenta a Zapatero con sus fantasmas: «Lo peor del 11M fue mantener una teoría deleznable de una conspiración con ETA»

ACTUALIDAD

La crisis económica del 2008, el final de ETA, la aprobación del matrimonio homosexual y del aborto fueron momentos clave de su Ejecutivo repasados en una cita en la que también alabó a Pedro Sánchez en relación a su postura con el independentismo y el caso Koldo
11 mar 2024 . Actualizado a las 21:41 h.Nunca hasta este pasado domingo el periodista Jordi Évole había entrevistado al ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero (Valladolid, 1960). «Era un poco reticente, me cuestan las entrevistas», se excusaba el quinto presidente del Gobierno de España después de la Transición. «No le cuesta tanto ir con Ferreras», le replicó el presentador. «Bueno, eso es otra cosa, tú eres un corredor de fondo», acabó diciéndole el que fue secretario general del PSOE entre el 2000 y el 2012. En efecto, el maratón de ZP con el antaño follonero, supuso un recorrido por las dos décadas que se cumplían desde su llegada a la Moncloa en 2004. Tres días después de los atentados terroristas del 11M en Madrid, los socialistas ganaban por mayoría absoluta las elecciones generales, alimentando en las filas populares la idea de que fue presidente únicamente por ese motivo. «Es una teoría que han mantenido los que no aceptaron la derrota, pero si no hubiéramos tenido ese atentado, que ojalá hubiera sido así, hubieran dicho otra cosa», explicó al respecto. «Lo peor fue mantener durante casi años una teoría deleznable de una posible conspiración en la que estaba ETA para provocar un cambio. Ahí se llegó a los niveles éticos más bajos de la democracia», argumentó Zapatero haciendo memoria de su caótica llegada a la Presidencia.
En el momento de mayor tensión de la historia democrática de nuestro país, el ex presidente tiene momentos guardados en su memoria fotográfica. «Recuerdo visitas a los hospitales, había muchas víctimas jóvenes, del barrio de Vallecas, y un grupo de chicas jóvenes, muy jóvenes me dijeron: Tienes que traer a las tropas de Irak. Ese fue un momento para mí muy impactante que recordé cuando tuve que tomar la decisión», detallaba sobre lo vivido durante las 72 horas que transcurrieron entre el atentado yihadista y los comicios.
Los hitos de su etapa en Moncloa
Los siete años de Gobierno de Rodríguez Zapatero incluyeron dos destacadas leyes de carácter social. Una fue la del matrimonio homosexual, que el 3 de julio de 2005 convertía a España en el tercer país del mundo en permitir la unión entre personas del mismo sexo. La otra, la ley del aborto, que sigue vigente a día de hoy pese a los intentos del Partido Popular de ser declarada inconstitucional, algo que el alto tribunal desestimó 13 años después de su aprobación. Al igual que en recientes campañas electorales en las que el ex presidente ha colaborado con su partido, volvió a mostrarse molesto con «la doble vara de medir del PP». «Salían sonrientes en las manifestaciones contra el matrimonio gay y cuando meses después de aprobar la ley fueron a la boda de Maroto (Javier Maroto: ex alcalde de Vitoria, ex diputado y hoy vicepresidente del Senado) y Rajoy gritaba ¡vivan los novios!».
También los peores momentos de sus mandatos fueron anoche tratados en la cita con Jordi Évole. En su primera legislatura, el atentado de ETA en la T-4 el 30 de diciembre de 2006. Llegaba en plena negociación del Ejecutivo con la banda terrorista para que abandonase la violencia armada. «Al ver las imágenes quedé en shock. Fue un doble drama la muerte de los dos ecuatorianos. Se avisó de la bomba por megafonía, avisó la Policía y estas dos personas, inmigrantes irregulares, se escondieron en un coche. Es doblemente dramático y duro. Esta reflexión se la he hecho a algún representante de Bildu hablando de la sinrazón de la violencia y de lo que fue», detalló sobre esos momentos.
Esa bomba precipitó el final de la banda terrorista, en palabras de Zapatero «fue un antes y un después». «Fue un final desde la política y el diálogo. Con diálogo. La cúpula de la banda terrorista me aseguró que era para siempre». Una victoria en su gestión que no solo personaliza en su persona, si no en los que estuvieron del otro lado. «No me importa decir la verdad. Hubo gente, que están en Bildu, que trabajó intensamente, lo hicieron, casi en complicidad con el Gobierno, muy especialmente después de la T4 y con Arnaldo Otegi entre otros».
Los últimos años de su Ejecutivo coincidieron con los coletazos de la crisis económica del 2008, que supusieron entre otras medidas dejar de revalorizar las pensiones o recortar en un 5 % el sueldo de los funcionarios. ¿Por qué no dimitió? «Porque tenía que afrontar aquella situación». «Lo pasé muy mal. Sobre todo, porque tenía una sensación muy poderosa de impotencia», señaló sobre ese momento, de los más difíciles en el sillón de mando.
El caso Koldo y la amnistía
Las cuestiones que atañen a Gobierno liderado por Pedro Sánchez también fueron objeto de debate. Sobre la trama de corrupción del principal asesor del que fuera mano derecha del Ministro de Transportes y secretario de organización del PSOE, José Luis Ábalos, Zapatero cierra filas con Pedro Sánchez: «reaccionó diciendo "caiga quien caiga", es el primero que reacciona así ante un escándalo», defendió. «No ha habido ningún dirigente del PSOE que haya salido y haya dicho: "Esto es una trama contra el PSOE"», haciendo una velada mención al PP.
La actual negociación de la ley de amnistía con el independentismo catalán fue considerada como «un mandato electoral», al igual que el que él tuvo con la retirada de las tropas de Irak. «Seguramente sea la ley más importante que va a aprobar en el mandato el presidente Sánchez», atisbó. «El PSOE tiene que hacerse cargo de la España plurinacional, gestionarla, porque no queremos la España de la extrema derecha con la derecha. Y para cumplir ese mandato hay que amnistiar».
La parte más emocionante fue para recordar a figuras muy importantes en su Ejecutivo ya fallecidas, Carme Chacón, Alfredo Pérez Rubalcaba y José Antonio Alonso. Para él, «la mejor manera de rendirles homenaje es luchar por sus ideas». Y la reflexión sobre política internacional tuvo que ver con el contexto bélico en Ucrania y la franja de Gaza. «Yo creo que la Unión Europea puede hacer más, Estados Unidos podría hacer mucho más para parar a Israel. Yo pienso que vamos a tener que esperar a la era post Biden o al post Trump, a un nuevo liderazgo. Mi generación no lo va a vivir, pero sé que llegará una generación donde la guerra sea algo que pueda abolirse como hemos abolido otras monstruosidades a lo largo de la historia». Una muestra más del «optimismo patológico» de José Luis Rodríguez Zapatero.
La entrevista emitida anoche consiguió un destacado 9,8% de share en La Sexta. La semana que viene el nuevo capítulo de Lo de Évole tiene como invitados a los creadores de la tecno-rumba, Camela.