Un fallo en el sistema de propulsión hace inviable que Estados Unidos pueda posar el módulo Peregrine en la superficie, en lo que iba a suponer el regreso de Estados Unidos al satélite en más de 50 años
19 ene 2024 . Actualizado a las 13:19 h.El módulo de aterrizaje Peregrine nunca podrá alcanzar la Luna. Los peores augurios se han confirmado y a la nave, que aspiraba a ser la primera desarrollada por una empresa privada, Astrobotic, en posarse sobre la superficie lunar, apenas le quedan 40 horas de combustible. Insuficiente para alcanzar el objetivo, lo que también frustra lo que iba a ser el primer regreso a la Luna de Estados Unidos en más de cincuenta años, cuando el astronauta Eugene Cernan fue el último hombre en pisar, en diciembre de 1972, el suelo del satélite.
«Cada éxito y cada revés son oportunidades para aprender y crecer. Utilizaremos esta lección para impulsar nuestros esfuerzos para avanzar en la ciencia, la exploración y el desarrollo comercial de la Luna», advirtió Joel Kearns, administrador asociado adjunto de exploración en la Dirección de Misiones Científicas de la NASA.
¿Qué ha ocurrido para que se frustrase la misión después de un exitoso lanzamiento? Finalmente se ha confirmado que ha sido una avería en el sistema de propulsión del módulo el origen del problema, lo que ha supuesto una pérdida de combustible. Lo que se desconoce aún es por qué ha ocurrido este fallo, algo, por otra parte, nada inusual en las misiones espaciales.
Lo que sí se ha conseguido es reorientar los paneles solares, por lo que se han recargado las baterías que han permitido recuperar las conexiones con la tierra y el funcionamiento operativo del módulo. Incluso ha sacado una fotografía que ofrece indicios sobre el origen del fallo. «La batería de la nave espacial ahora está completamente cargada y estamos utilizando la energía existente de Peregrine para realizar tantas operaciones de carga útil y de nave espacial como sea posible», señala la empresa Astrobotic en un comunicado.
«Si los propulsores pueden continuar funcionando, creemos que la nave espacial podría continuar en un estado de orientación durante aproximadamente 40 horas más, según el consumo actual de combustible», añadió la compañía en su última actualización. El objetivo pasa ahora por acercar la nave lo más cerca posible a la Luna para extraer el mayor rendimiento de los instrumentos científicos a bordo, aunque nunca será posible llevar a cabo un alunizaje.
El módulo tenía por delante un viaje de 46 días para llegar a la superficie lunar y convertirse en la primera nave estadounidense en alunizar desde 1972.
Peregrine transporta instrumentos científicos de la NASA como parte de su iniciativa de Servicios Comerciales de Carga Lunar (CLPS, por sus siglas en inglés) cuyo objetivo era el estudio de la exosfera lunar (la capa externa), las propiedades térmicas del regolito lunar (la capa de materiales no consolidados que descansan sobre roca sólida), la abundancia de hidrógeno en el suelo del lugar de aterrizaje y el seguimiento al entorno de radiación.
La NASA tiene copias de los instrumentos que se iban a llevar a cabo, por lo que serán reutilizados en futuras misiones.
La misión tampoco ha sido un fracaso del todo. La buena noticia ha sido el éxito conseguido con el nuevo cohete Vulcan Centaur, desarrollado también por la iniciativa privada. Se utilizará en futuras misiones.
El módulo Peregrine también transportaba un fragmento de roca del Monte Everest, y las cenizas y ADN de entusiastas del espacio como el creador de “Star Trek”, Gene Roddenberry, así como de varios expresidentes de Estados Unidos.