Trump, la pistola y el segundo debate electoral

Miguel Palacio NUEVA YORK / E. LA VOZ

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Trump, el martes, en Summerville.
Trump, el martes, en Summerville. SAM WOLFE | REUTERS

El expresidente de EE.UU. se perderá un debate «estúpido» después de querer adquirir un arma de fuego de forma ilegal

27 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras una visita de campaña a Carolina del Sur en la que, a pesar de tenerlo prohibido por ley, Donald Trump afirmó que quería hacerse con un arma de fuego, el expresidente de Estados Unidos continuará la campaña en Míchigan el miércoles, perdiéndose así el segundo debate electoral republicano. Por su lado, Joe Biden visitó Míchigan un día antes.

Según el Comité Nacional Republicano (RNC, por sus siglas en inglés), el segundo debate republicano, que tendrá lugar el miércoles por la noche en California, contará con siete de los candidatos, uno menos que el primer debate. El exgobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, no habría cumplido los requisitos marcados por el RNC. Donald Trump, que lidera las encuestas de las primarias, no participará, por voluntad propia, en un debate al que el lunes se refería como «estúpido».

Así, el miércoles, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, la exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, el exvicepresidente, Mike Pence, el empresario Vivek Ramaswamy, el gobernador de Dakota del Norte, Doug Burman y el exgobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, presentarán y debatirán sus propuestas ante los votantes.

Por su lado, el expresidente Donald Trump, que comenzaba la semana en Carolina del Sur, afirmó que el debate era «una entrevista de trabajo» y dijo no «estar demasiado interesado».

También durante la visita de Trump al estado sureño, la campaña del expresidente se vio obligada a recular, tras afirmar que el lunes, durante una visita a una tienda de armas, el candidato se había hecho con un arma de fuego, algo que un imputado criminal tiene prohibido por la legislación estadounidense.

El desmentido llegó después de que el propio Trump apareciese en un vídeo difundido por su campaña a través de redes sociales afirmando que quería hacerse con una pistola Glock, y después, también, de que uno de los portavoces afirmase que Trump había adquirido el arma en una publicación en la red social X. En el vídeo, el expresidente dice: «Quiero comprar una» en referencia a la pistola que sostiene uno de sus acompañantes. Después de la respuesta de este, Trump insiste: «No, quiero comprar una».

El episodio tuvo lugar en una armería de Summerville en Carolina del Sur durante una parada de campaña improvisada. Trump acudió a la armería acompañado, entre otros, de la congresista por Georgia, Marjorie Taylor Greene, y del fiscal general de Carolina del Sur, el republicano Alan Wilson. Desde la armería surcarolina, el expresidente de Estados Unidos también quiso dejar claro que, de proponérselo, sería capaz de diseñar mejores aviones de combate que los que diseña el ejército de Estados Unidos.

Mientras su rivales se ven las caras en California, Trump viajará el miércoles a Míchigan donde tiene previsto dirigirse a los huelguistas del sindicato de fabricantes de coches. No es el único candidato que ha viajado a Míchigan. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, estuvo en Míchigan el martes. Allí se unió a los piquetes y arengó a los huelguistas. «Os merecéis mucho más de lo que os pagan» les dijo Biden.