«No podían defenderse de Azerbaiyán, se enfrentaban a la eliminación total»
20 sep 2023 . Actualizado a las 21:35 h.Tras dos días de combates en Nagorno Karabaj, las autoridades azeríes y los separatistas armenios anunciaron el miércoles un alto el fuego en la zona. El acuerdo entró en vigor a las 13:00 hora local (dos horas menos en España) y el jueves, en la ciudad azerbaiyana de Yevlaj, las dos partes mantendrán conversaciones sobre la «reintegración» del territorio a Azerbaiyán.
El cese de las hostilidades se alcanzó mediante negociaciones con el contingente ruso de mantenimiento de la paz en la región. En dichas negociaciones se ha previsto la retirada de unidades y equipos militares armenios del Karabaj, así como el desarme de las fuerzas de defensa locales.
El presidente azerbaiyano, Ilham Alíyev, expuso la noche del martes —durante una conversación telefónica con el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken— las condiciones para que el Ejército de Bakú detenga la operación «antiterrorista» lanzada este martes contra la parte de Nagorno Karabaj que no controla. Según la información difundida por ambos tras el contacto telefónico, Alíyev dijo que, si los grupos armenios armados «deponen las armas y se rinden, se suspenderán las medidas antiterroristas». De acuerdo con sus palabras, los armenios que viven en el disputado enclave montañoso «fueron invitados repetidamente a dialogar, pero todas las veces rechazaron reunirse. Incluso comenzadas ya las actividades antiterroristas fueron instados nuevamente al diálogo».
Alíyev informó a Blinken sobre las razones por las que se inició la ofensiva en Nagorno Karabaj. Señaló que «civiles y militares azerbaiyanos fueron víctimas de las explosiones de minas instaladas por las Fuerzas Armadas de Armenia [...], cuyos efectivos dispararon contra las posiciones del Ejército azerbaiyano con morteros y armas ligeras de distintos calibres», indica el servicio de prensa de la Presidencia de Azerbaiyán.
Solo objetivos militares
Asimismo, el líder azerbaiyano le aseguró a Blinken que sus tropas «están desactivando localmente solo objetivos militares legítimos del enemigo. Los civiles y la infraestructura urbana no son objetivos de las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán». Por su parte, el secretario de Estado de EE.UU., según el comunicado de prensa, expresó «su preocupación por la situación reinante, pidió detener las hostilidades y afirmó que Washington apoya el diálogo directo entre Bakú y los armenios que viven en la región del Karabaj».
Además de Estados Unidos, la ONU, la Unión Europea y Rusia también habían pedido a Bakú que detuviese la operación militar en curso e iniciase negociaciones para poner fin al contencioso. Los armenios han denunciado la muerte de 27 personas —entre ellas, dos civiles— y más de 200 heridos durante la jornada del martes por los bombardeos y disparos del Ejército azerbaiyano.
Este nuevo rebrote de violencia entre armenios y azerbaiyanos provocó la pasada noche concentraciones de protesta en Ereván (capital de Armenia) contra el primer ministro, Nikol Pashinián, a quien tachan de pusilánime, y contra Rusia, cuyo contingente de paz desplegado en la zona, a juicio de los manifestantes, no ha hecho nada para evitar la «agresión» de Azerbaiyán.
La multitud rodeó el edificio del Gobierno armenio, trató de penetrar en su interior, y también en la Embajada rusa en Ereván, que quedó completamente bloqueada. Los disturbios provocaron heridos entre los manifestantes y los agentes de la Policía. Pashinián aseguró que «está habiendo llamamientos a perpetrar un golpe de Estado» desde distintos puntos del país.
Operación relámpago
La situación para Nagorno Karabaj, que ya había perdido una tercera parte de su territorio en la guerra del 2020, era insostenible después de que el enemigo rompiese sus defensas en varios sectores con ayuda de ataques masivos de su artillería y aviación. El Ejército Azerbaiyano logró su objetivo en 24 horas.
«Nagorno Karabaj no tiene recursos para defenderse de Azerbaiyán. Los armenios del Karabaj debían combatir hasta el final o rendirse, y es evidente que optaron por la segunda opción para evitar su completa eliminación. Se puede decir que Azerbaiyán ha solucionado el problema que tenía con la región», comentó a Efe Amirán Salukvadze, general de brigada georgiano.
La diplomacia europea acusa a Rusia de pasividad ante la ofensiva azerí
El Servicio de Acción Exterior de la Unión Europea (SEAE) acusó ayer a Rusia de actuar con pasividad frente a la nueva ofensiva de Azerbaiyán en Nagorno Karabaj.
En una intervención en el Parlamento Europeo, el vicedirector ejecutivo del SEAE para Europa del Este y Asia Central, Luc Pierre Devigne, cargó contra Moscú —que cuenta con unos 2.000 efectivos de mantenimiento de la paz en la región atacada— por «no hacer nada» para frenar la agresión de Bakú. Indicó que los rusos podrían haber jugado un papel para bloquear de forma «pasiva» las operaciones militares. «No estoy pensando en que disparen a las fuerzas azeríes, pero sí en que bloqueen las carreteras e impidan los ataques», añadió Devigne, tras asegurar que este episodio pone de manifiesto el «cinismo» de Rusia respecto a Armenia.