Macron y Meloni dejan de lado sus diferencias para hablar de inmigración

asunción serena PARÍS / E. LA VOZ

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Giorgia Meloni y Emmanuel Macron, en una imagen de archivo
Giorgia Meloni y Emmanuel Macron, en una imagen de archivo CHRISTOPHE PETIT TESSON | EFE

El presidente francés recibió este martes en el Elíseo a la primera ministra italiana

21 jun 2023 . Actualizado a las 08:31 h.

Emmanuel Macron recibió este martes por primera vez en el palacio del Elíseo a Giorgia Meloni. La presidenta del Gobierno italiano se encontraba en París para defender ante el Bureau International des Expositions la candidatura de Roma con vistas a acoger la Exposición Universal del 2030, y ambos dirigentes no dejaron pasar la ocasión para intentar restañar las heridas abiertas en los últimos meses en torno al tema de la inmigración. Fue una «ocasión importante» para reforzar el diálogo entre ambos, según declaró Meloni al llegar al Elíseo.

Aunque los dos líderes se han visto en las diversas cumbres que han tenido lugar en los últimos ocho meses, hasta ahora no había habido posibilidad de celebrar un encuentro bilateral, en gran parte porque las relaciones entre París y Roma han estado marcadas a lo largo del año por una serie de crisis o «controversias», como las calificó este martes Macron.

La primera se produjo cuando Italia se negó a dejar acostar el Ocean Viking, que transportaba a 230 migrantes recogidos en alta mar, y forzó a Francia a abrir el puerto militar de Toulon para acogerlo. La última tuvo como protagonista al ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, que desató la ira en el otro lado de los Alpes cuando declaró que Meloni era «incapaz de solucionar los problemas migratorios por los que ha sido elegida». Estas declaraciones provocaron la anulación del viaje previsto para ese mismo día del ministro de Exteriores, Antonio Tajani, que calificó de «insulto gratuito y vulgar» las declaraciones del ministro galo, y reclamó «excusas» de su parte.

A los temas de migración se unió la cena organizada en el Elíseo en torno al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, a la que fue invitado Olaf Scholz, pero no Giorgia Meloni.

Pero más allá de estas controversias, Francia e Italia mantienen un amplio marco de cooperación precisamente sobre inmigración. El objetivo es «defender los intereses comunes esenciales», según fuentes del Elíseo, y la reunión ha permitido constatar «convergencias» para avanzar juntos.

Es la primera visita de Meloni a Francia desde que ganó las elecciones el pasado otoño, pero no es la primera vez que la presidenta del Gobierno italiano y Macron celebran una entrevista a solas. El presidente francés no llamó a Meloni para felicitarla por su triunfo en los comicios, pero sí fue el primer dirigente que le estrechó la mano, ya que el 23 de octubre viajó a Roma para participar en la conferencia de Sant'Egidio, y organizaron al margen un encuentro de varias horas en un hotel de la capital italiana, antes de que Meloni asumiera su cargo. Un encuentro «a hurtadillas», tal como tituló entonces la prensa gala.

Esta vez, la entrevista entre ambos ha sido bajo las cámaras y bajo los oropeles del palacio del Elíseo, pero para Macron darle alas a Meloni significa también dar posibilidades al triunfo de Marine Le Pen en Francia.