El Move Forward, el partido reformista que dio la campanada en las elecciones de Tailandia
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La formación naranja, liderada por el carismático Pita Limjaroenrat, superó contra pronóstico al partido apoyado por los militares y la monarquía del país
15 may 2023 . Actualizado a las 17:29 h.Con una importante base de voto joven, el partido reformista Move Forward (Avanzar), cuyo objetivo es modernizar el país y reducir el poder de los militares, ha dado la sorpresa al alzarse, contra todo pronóstico, como claro ganador de las elecciones generales del domingo en Tailandia.
La formación, heredera de la ilegalizada Future Forward, consiguió hacerse con 151 diputados al recibir más de 10 millones de votos y superar al gran favorito en estos comicios, el Pheu Thai, ligado al ex primer ministro y oligarca exiliado Taksin Shinawatra.
El joven partido Move Forward, con una ambiciosa agenda de reforma, ha superado las expectativas, mientras que el Pheu Thai, ligado al poderoso clan Shinawatra, queda segundo con más de 8 millones de papeletas y 141 diputados.
El líder de Move Forward, al que todas las encuestas situaban en segunda posición, es Pita Limjaroenrat, un carismático político de 42 años y aspecto juvenil que se formó en las elitistas universidades estadounidenses de Harvard y Massachusetts Institute of Technology.
Antes de dedicarse de pleno a la política, Pita trabajó en la empresa familiar y como director ejecutivo de la aplicación de servicios de transporte y reparto Grab.
El partido, identificado con el color naranja y un estilo fresco, ha construido una gran base de apoyos entre una generación de jóvenes tailandeses que están cansados de un sistema político inmovilista con muchas carencias democráticas, dominado por el Ejército, la monarquía y las grandes fortunas.
Aunque la victoria anoche en Bangkok, la provincia más poblada donde han arrasado, muestra cómo su base de votantes se ha ampliado a todas las edades.
Entre sus propuestas se encuentran la de devolver a los uniformados a los cuarteles después de una «década perdida», en la que ha estado en el poder el general golpista Prayut Chan-ocha, quien tras el golpe de Estado del 2014 se reconvirtió en político y ganó las lecciones del 2019.
Además, Move Forward ha prometido acabar con los poderosos monopolios que dominan la economía tailandesa y reformar la polémica ley de lesa majestad, que pena con hasta 15 años de cárcel cualquier ofensa o insulto contra la familia real.
La formación naranja ha sido el único partido de peso que se ha atrevido a hablar de aspectos tan polémicos en Tailandia y que atañen a una espinosa reforma de la monarquía, a la que se oponen ferozmente los sectores más conservadores.
Espíritu de las protestas
El inesperado partido ganador ha sabido recoger el espíritu de las protestas lideradas por los estudiantes del 2020, cuando centenares de miles de jóvenes salieron a las calles de Bangkok de manera pacífica para expresar su malestar y demandar una serie de cambios democráticos que alcanzaban al Ejército y a la todopoderosa casa real.
El movimiento estudiantil fue aplacado, principalmente, con la encarcelación de sus líderes y otros 2.000 jóvenes que se encuentran procesados por su participación en las manifestaciones.
Más de un decena de los protagonistas de esas protestas, que removieron los cimientos del poder en Tailandia, se han presentado en las listas de Move Forward para estas elecciones.
En los comicios del 2019, la formación, entonces conocida como Future Forward, obtuvo más de seis millones de votos y 81 escaños, lo que la convirtió en el tercer mayor partido en el parlamento tailandés.
Un año después, el Tribunal Constitucional la disolvió por una irregularidad en la financiación y prohibió a su entonces líder, Thanathorn Juangroongruangkit, ejercer la política durante una década, decisiones que detonaron las protestas callejeras.
La pregunta hoy es si el poderoso establishment tailandés, que aglutina al Ejército, la Corona y los poderes económicos, va a permitir gobernar al partido de la nueva generación.
«La gente no permitirá un golpe de Estado»
Pita Limjaroenrat indicó este lunes que el pueblo no permitirá un nuevo golpe de Estado militar, tras los ocurridos en 2006 y 2014, ni otras maniobras para impedir que gobierne.
«El pueblo tailandés ha hablado y yo estoy listo para ser el primer ministro», dijo Pita en una rueda de prensa tras conocerse los resultados de los comicios, divulgados por la Comisión Electoral.
Preguntado sobre un eventual golpe de Estado y otros posibles factores que podrían impedir la formación de Gobierno o su elección como primer ministro, Pita señaló que no está «preocupado» pero no es «descuidado» y aseguró que «la gente de Tailandia no permitirá que eso suceda».
«El pueblo ha perdido mucho en la última década. Hoy es un nuevo día», matizó Pita, cuyo partido superó de forma inesperada al inicialmente favorito Pheu Thai, que ha ganado por escaños todas las elecciones desde el 2001.
El Pheu Thai y otras formaciones ligadas a la familia Shinawatra han sido defenestrados del poder varias veces por la élite promilitar y monárquica, incluidos los golpes militares del 2006 y el 2014 y la destitución de dos primeros ministros por decisiones judiciales en 2008.
Agenda reformista
Pita agregó que el Move Forward, mantendrá muy popular entre las generaciones más jóvenes, mantendrá en el Parlamento su agenda reformista y presentará una propuesta para cambiar la controvertida ley de lesa majestad, que prevé penas de cárcel de hasta 15 años para quien ofenda la poderosa monarquía del país.
«Usaremos el Parlamento para asegurarnos de que haya una extensa discusión con la mayoría, con transparencia y de cómo debemos avanzar en lo que dice respecto sobre la relación entre la monarquía y el pueblo», recalcó.
Sin embargo, el primer obstáculo serán los 250 senadores elegidos a dedo por la antigua junta militar que participan en el nombramiento del primer ministro. «Entre los seis partidos lograríamos aproximadamente 309 escaños de los 500 de la Cámara Baja», declaró en una rueda de prensa el líder de la formación, Pita Limjaroenrat, que reiteró su deseo de convertirse en primer ministro poco después de que la Comisión Electoral anunciara los resultados provisionales.