«Hay que desmitificar la maternidad, porque no es una película de Disney»

Todo lo que siempre quiso saber sobre el posparto y nadie se atrevió a contarle. Ese es el espíritu de los talleres que a partir de este lunes impartirán las expertas Paula García Otero y Verónica Fernández López en los centros cívicos de A Coruña. «Nuestro objetivo es tratar las necesidades de la madre y de las familias; aportar información para reducir miedos e inseguridades y que puedan conectar con ellas mismas y tomar decisiones libres. Así como concienciar de la presión social».

Pregunta. Por fin un poquito de atención al posparto.

Verónica Fernández. Es muy necesario. Hay que desmitificar la maternidad porque está idealizada y no es una película de Disney ni la imagen de Pilar Rubio en la piscina con sus cuatro hijos. Ella representa su maternidad, pero hay muchos tipos y la perfección no existe. Suele ser una época de caos interno y externo. Y necesitamos que haya menos presión social hacia la mujer.

Paula García. Siempre se enfoca todo al parto, cuando los principales cambios en el plano físico, emocional y sexual suceden después. Por eso queremos aportar apoyo en esa etapa. Vemos la necesidad de apoyar y acompañar.

P. Tradicionalmente se llama cuarentena. ¿Cuánto dura en verdad?

V. F. Cuarenta días no, desde luego. El cuerpo de la mujer tarda nueve meses en llegar al parto y necesita otros nueve meses, como mínimo, para recuperarse. Y nunca vuelve a ser la misma.

P. ¿No serán unas talibanas de la lactancia materna, no?

V. F. Sabemos que muchas mujeres no se acercan a este tipo de asesorías porque tienen miedo a sentirse juzgadas. No dar el pecho al bebé es una opción dentro de los distintos tipos de lactancia y hay que respetar todas las necesidades de la mujer en ese momento.

P. G. Todas las lactancias son válidas y todas deben ser acompañadas. Al igual que no te enseñan a dar la teta, tampoco te enseñan cómo preparar un biberón.

P. ¿La depresión posparto existe?

V. F. Y es demoledora, pero es normal y tiene solución. Estás triste, no entiendes por qué y encima genera una culpa terrible.

P. Frases que no se deben decir a las parturientas: «No cojas tanto al bebé que se malacostumbra».

V. F. Esa es una. O eso de «Hay que darle el pecho cada cuatro horas». Que ahora no se recomienda eso, pero ya te hace dudar.

P.G. Ya te hace coger el móvil y ponerte a buscar en Google eso, o si hay que dormirlo boca arriba o boca abajo. Que si cuánto lo coges en el colo, o que a ver cuándo lo pasas a la cuna.

P. ¿Y cuándo hay que pasarlo?

P.G. Preferimos que cada una tome sus propia decisiones. Damos recomendaciones sanitarias.

Lo que debe saber: Que con ir a un solo taller, llega. Que hay que preinscribirse antes en el centro cívico. Que son por las tardes de cuatro a siete, pero no hace falta que esté presente todo el rato. Que puede ir con sus hijos. Que a los hombres les interesa mucho. Y que abuelas/os y suegras/os son bienvenidos.

«Nadie habla de miedos como ir al baño o las primeras relaciones sexuales»

Paula García es sanitaria, asesora de lactancia y va por su tercer posparto. Verónica Fernández, mediadora y coach educativa, lleva dos. Ambas coordinan el taller de posparto real en los centros cívicos.

P. ¿Qué no se cuenta del posparto?

P. G. Casi nada. Nadie habla de los cambios emocionales, hormonales, etcétera, que nos llevan a determinadas conductas. O de miedos como ir al baño o a las primeras relaciones sexuales, por ejemplo.

V. F. Son cosas que no se hablan pero que casi todas las mujeres tememos después de dar a luz. Como no te lo han contado antes, te preocupas.

P. Pero son cosas normales.

V. F. ¡Claro! Son cosas normales que pasan, pero de las que nadie les ha hablado.

P. ¿Cuál es la pregunta que más les hacen?

P. G. El tema sexual, cómo readaptar la relación de pareja y los primeros cuidados del bebé. La lactancia es el tema estrella, y el tema emocional.

V. F. Hasta que entienden que no son las únicas a las que les pasa todo esto y que todo tiene una explicación. A veces dudamos de nosotras mismas y resulta que nuestra amiga está en la misma situación. A lo mejor no somos capaces de hablarlo con ella porque la vemos fenomenal, pero ella está exactamente igual que nosotras.

P. No ayuda que la famosa de turno luzca sin tripa a los dos días.

V. F. ¿A quién no le gustaría eso?

P. G. Pero es ciencia ficción.

P. No puedo despedirlas sin preguntarles por Ana Obregón.

V. F. Me resulta difícil juzgarla porque me conmueve todo lo que debe de estar pasando ella, pero hay que pensar en el bebé.

P. G. Lo mismo. No creo que los vacíos haya que cubrirlos a costa de la vida de otra persona.

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