ERC y EH Bildu se alejan de los socialistas y secundan las tesis de Irene Montero en la ley del «solo sí es sí»

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Pedro Sánchez (de espaldas), en su escaño del Congreso, conversando con el portavoz de ERC, Gabriel Rufián
Pedro Sánchez (de espaldas), en su escaño del Congreso, conversando con el portavoz de ERC, Gabriel Rufián Juan Carlos Hidalgo | EFE

Presentan enmiendas a la norma que dejan su aprobación en manos del PP

06 abr 2023 . Actualizado a las 19:07 h.

ERC y EH Bildu, principales socios del Gobierno de coalición, han presentado enmiendas conjuntas a la proposición de ley del PSOE para reformar la ley del «solo sí es sí» con el objetivo de retirar de ese texto las alusiones a la «violencia» e «intimidación» que pretenden incluir los socialistas. Es decir, los socios se decantan por la tesis de Unidas Podemos y del Ministerio de Igualdad, partidarios de que el consentimiento —eje de la ley— se mantenga tal y como está.

La iniciativa del PSOE, presentada ante la sucesión de rebajas de penas a delincuentes sexuales a raíz de la entrada en vigor de la ley, mantiene la agresión como tipo único, pero eleva las penas a aquellas que se cometan con violencia o intimidación o cuando la víctima tenga anulada por cualquier causa su voluntad.

El texto de los socialistas rescata varias de las horquillas previas del Código Penal, elevando principalmente las penas mínimas que han propiciado las rebajas de condenas de agresores sexuales. Según la ley del «solo sí es sí», será castigado como autor de agresión sexual el que realice cualquier acto que atente contra la libertad sexual de otra persona sin su consentimiento, y «solo se entenderá que hay consentimiento cuando se haya manifestado libremente mediante actos que, en atención a las circunstancias del caso, expresen de manera clara la voluntad de la persona».

El castigo es una pena de prisión de 1 a 4 años, que la reforma eleva a una horquilla de 1 a 5 años «si la agresión se hubiera cometido empleando violencia e intimidación o sobre una persona que tenga anulada por cualquier causa su voluntad».

En el caso de las violaciones, la ley del «solo sí es sí» fijó una pena de 4 a 12 años y la propuesta socialista señala que si se usó violencia o intimidación o la víctima tenía anulada su voluntad, el castigo ascenderá a entre 6 y 12 años.

Pero tanto ERC como EH Bildu piden que los artículos 178 y 179 de Código Penal se mantengan tal y como están para «proteger el consentimiento como centro de la ley», lo que deja la aprobación de la reforma en manos del apoyo del PP a al texto presentado por el PSOE. A su juicio, la reincorporación de los términos de «violencia e intimidación» como centrales en el tipo penal de agresión sexual, agregando el elemento de anulación de la voluntad de la víctima «desplaza el consentimiento como el elemento definidor entre una relación sexual consentida y una agresión sexual».