Miles de israelíes protestan contra la reforma judicial de Netanyahu por tierra, mar y aire
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La masiva movilización comenzó hace diez semanas y cuentan con el apoyo de referentes de la economía, la justicia, la cultura y cada vez más reservistas del Ejército
09 mar 2023 . Actualizado a las 17:05 h.Decenas de miles de israelíes volvieron a manifestarse contra la reforma judicial impulsada por el Gobierno derechista de Benjamin Netanyahu, en el marco de un masivo movimiento de protesta que este jueves se extendió al aeropuerto internacional de Ben Gurión y al principal puerto del país en Haifa.
Las protestas contra la polémica iniciativa, que busca otorgar más poder al Ejecutivo en detrimento de la Justicia, se ampliaron este jueves a más frentes, abarcando aire, mar y tierra y en lo que los organizadores describieron como «una jornada de resistencia contra la dictadura».
Los asistentes se desplegaron desde temprano en distintos puntos del país, incluyendo en el principal puerto mercante, en la ciudad de Haifa, al norte de Israel. Allí, una flotilla de reservistas de la Marina bloquearon el tráfico marítimo, argumentando que «en una dictadura, el mar está cerrado», en lo que representa la primera protesta en el mar desde que comenzaran las manifestaciones.
Como ya se ha hecho costumbre desde el inicio de las protestas hace diez semanas, los manifestantes se concentraron en instituciones educativas y políticas en distintas ciudades y bloquearon múltiples carreteras a lo largo y ancho de Israel, incluyendo la arteria principal de Tel Aviv, la autopista Ayalon.
Durante estos cortes, se registraron enfrentamientos con la Policía y al menos 15 manifestantes fueron arrestados.
Tel Aviv se rebela contra una norma contra las minorías
Tel Aviv, corazón financiero del país, volvió a ser el epicentro de las protestas, que contaron con la presencia ya habitual de grandes grupos de trabajadores de empresas de alta tecnología, a los que se sumaron cientos de activistas LGTBI, quienes alertan desde hace tiempo que la reforma judicial afectará especialmente a las minorías de Israel.
Este jueves, sin embargo, una de las manifestaciones más importantes e inusuales tuvo lugar en el aeropuerto internacional de Ben Gurión, en las afueras de Tel Aviv.
Durante varias horas, un flujo permanente de manifestantes obstaculizó el acceso al aeropuerto con sus vehículos, con el fin de impedir la partida del primer ministro, Benjamín Netanyahu, rumbo a Italia para una visita oficial.
«Tenemos que proteger la democracia aunque tengamos que bloquear todo el país, porque nos negamos a ser ahogados por una dictadura», dijo a Efe Raúl Rodríguez, residente de Tel Aviv de 63 años nacido en Uruguay. «Queremos que Netanyahu se vaya y no regrese a Israel, aquí nadie lo quiere, solamente la Policía», agregó, en alusión al juicio por corrupción que enfrenta el mandatario, acusado de fraude, cohecho y abuso de confianza en tres casos distintos.
Debido a las protestas en el aeropuerto, el primer ministro tuvo que llegar en helicóptero para abordar su vuelo rumbo a Roma, donde tiene previsto reunirse con su homóloga italiana, la ultraderechista Giorgia Meloni.
«Haremos todo lo posible para evitar la interrupción de la vida de los ciudadanos del país y no permitiremos que nadie perturbe la democracia israelí y cancele la decisión de la mayoría», dijo Netanyahu antes de volar a Italia.
«La cuestión aquí no es la reforma judicial en absoluto. El objetivo aquí es derrocar a un Gobierno elegido democráticamente hace apenas unos meses y llevar a cabo nuevas elecciones», denunció el mandatario, quien antes de despegar mantuvo un encuentro con el secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin.
Austin llegó este jueves para una visita oficial y, debido a la gran concentración de manifestantes en carreteras del centro del país, se vio obligado a mantener sus reuniones, con Netanyahu y con el ministro de Defensa, Yoav Galant, en las inmediaciones del aeropuerto.
En sus declaraciones, el primer ministro hizo referencia a las negociaciones con la oposición sobre el texto de la reforma judicial y destacó que «continúan los esfuerzos para tratar de llegar a un entendimiento, pero hasta ahora todos estos esfuerzos se han topado con un rechazo general y total por parte de la oposición y con intentos por sumergir al país en la anarquía».
El presidente israelí, Isaac Herzog, anunció esta semana que sus intentos de mediación están «más cerca que nunca» de alcanzar un acuerdo que permita llevar a cabo una reforma consensuada, en lugar de la propuesta del Gobierno de Netanyahu y sus socios ultraderechistas y ultraortodoxos.
¿Qué propone la reforma?
La propuesta original, que continúa avanzando en el Parlamento, incluye proyectos como la denominada «cláusula de anulación», que permitiría a una mayoría simple de diputados derogar fallos emitidos por el Supremo.
También están incluidas iniciativas que otorgarían al Gobierno control total sobre el nombramiento de los jueces, además de permitir que cargos políticos ocupen los puestos de asesores legales en los ministerios.
Apoyos
Los manifestantes, que cuentan con el apoyo de referentes de la economía, la justicia, la cultura y cada vez más reservistas del Ejército, rechazan esta iniciativa al considerar que erosionaría la separación de poderes y debilitarían las bases de la democracia israelí.
Desde antes incluso de que se presentara el proyecto de reforma, representantes de la Justicia israelí ya hacían sonar las alarmas. Desde bufetes de abogados hasta la presidenta del Tribunal Supremo, el rechazo ha sido prácticamente unánime.
«Estamos convencidos de que esta iniciativa no mejorará el sistema sino que amenaza con destruirlo», advirtió una carta firmada por todos los exfiscales generales del Estado aún vivos.
La presidenta del Supremo, Esther Hayut, denunció que la reforma «destruiría el sistema judicial» y representaría «una herida mortal a la independencia de la Justicia». A ella se sumaron 18 exmagistrados del Supremo, que alertaron que los cambios previstos son «una amenaza para el sistema político y el estilo de vida en Israel».
Economistas y sector de alta tecnología
Dos expresidentes del Banco Central de Israel (BCI) publicaron una tribuna conjunta en Yedioth Aharonoth, diario más leído del país, pronosticando que el debilitamiento de la Justicia traería «un fuerte golpe a la economía y a la población perjudicando su calificación crediticia.
«En la medida en que el mercado perciba que la reforma legal daña la fortaleza e independencia de las instituciones estatales y aumenta la incertidumbre en el entorno de inversión, esto puede perjudicar la actividad económica», advirtió también la economista principal del Ministerio de Finanzas, Shira Greenberg.
El actual presidente del BCI, Amir Yaron, ha mantenido varias reuniones con Netanyahu para advertirle del riesgo de fuga de capitales y de los temores de los inversores internacionales, lo que podría provocar »una crisis económica en cualquier momento«, llegó a afirmar en esos encuentros según la prensa hebrea.
El sector bancario ha alertado de que ya han salido del país 4.000 millones de shékels (1.050 millones de euros) e importantes empresas del vital sector de la alta tecnología -que representa el 15 % del PIB de Israel-, como Riskified o Papaya Global, ya han anunciado su intención de abandonar el país.
De hecho, los trabajadores de la alta tecnología son uno de los pilares sobre los que se asienta el movimiento de protesta contra la reforma judicial, y de manera insólita, han llevado a cabo varios paros laborales.
Militares
Más de 400 exmiembros de las fuerzas de seguridad, incluyendo altos cargos del Ejército y de los servicios de inteligencia Mossad y Shin Bet, destacaron que los primeros perjudicados por la reforma y su impacto en la independencia de la Justicia »serán los soldados y las fuerzas de seguridad, así como su defensa física y legal«.
Esta misma semana se desató una catarata de reservistas, desde soldados rasos hasta algunos de los más respetados agentes de inteligencia, que anunciaron que no prestarían servicio en tanto el Gobierno avance con los cambios previstos.
«El miércoles 8 de marzo dedicaremos nuestro tiempo al discurso y al pensamiento en aras de la democracia y la unidad del pueblo, por lo que no nos reportaremos a servicio de reserva en este día», lee una carta firmada por 37 de los 40 reservistas del 69º Escuadrón de la Fuerza Aérea, responsable de operar los aviones de combate F-15.
En otra misiva remitida a Netanyahu un día después, todos los exjefes de la Fuerza Aérea vivos le pidieron que frene inmediatamente esa reforma, ya que la tensión social que ha desatado supone «un peligro grave y tangible para la seguridad del país».
Premios Nobel
Un grupo de siete ganadores del premio Nobel publicó el mes pasado una carta abierta para expresar su «profunda preocupación» ante lo que describieron como un «cambio de régimen con claros impactos negativos» sobre instituciones educativas y de investigación «que representan el motor económico y de seguridad del país».
La carta advirtió sobre los peligros de asemejarse a países como Turquía, Polonia y Hungría: «La investigación científico-tecnológica y la educación superior avanzada prosperan en países democráticos donde existe una clara separación de poderes».