Se acaba de publicar una investigación que sostiene que algunos sistemas naturales pueden colapsar al ritmo actual
26 dic 2022 . Actualizado a las 15:18 h.El conocimiento sobre el sistema climático ha avanzado notablemente en las últimas décadas. También sobre el calentamiento global de origen humano. En los últimos años ha surgido un nuevo concepto que ha revolucionado la ciencia del clima. Y no es otro que el punto de inflexión o no retorno.
Varias investigaciones publicadas en las mejores revistas del mundo sostienen que al ritmo actual de emisiones algunos de los mecanismos más importantes que regulan la temperatura global podrían colapsar y entrar en un punto de no retorno. Esto básicamente quiere decir que un sistema natural, como la corriente del Atlántico norte, podría dejar de circular como lo ha hecho durante los últimos miles de años y provocar un cambio drástico en el clima mundial.
Esta semana se ha sabido gracias a una publicación en la revista Nature Climate Change que el riesgo de algunos eventos de inflexión podría aumentar considerablemente en determinados escenarios de exceso del calentamiento global. El estudio sitúa la mayor amenaza en la capa de hielo de Groenlandia y la Antártida occidental.
«Incluso si lográramos limitar el calentamiento global a 1,5 grados no sería suficiente ya que el riesgo de desencadenar uno o más puntos de inflexión globales seguiría siendo superior al 50 %», advierte Nico Wunderling, científico del Instituto de Potsdam para la Investigación del Clima, en Alemania, y autor principal del estudio. «Para prevenir eficazmente todos los riesgos de inflexión, el aumento de la temperatura media global tendría que limitarse a no más de un grado y actualmente ya estamos en alrededor de 1,2 grados», añade el investigador y coautor Jonathan Donges.
Otros dos elementos de inflexión considerados en este trabajo, la corriente del Atlántico norte y la selva amazónica tienen umbrales críticos de temperatura más elevados. Sin embargo, reaccionarían mucho más rápido una vez iniciado el cambio. Por tanto, es mucho más difícil detener su proceso de inflexión una vez iniciado. Se prevé que las actuales políticas de mitigación conduzcan a un calentamiento global de entre 2 y 3,6 grados. También que la frontera de 1,5 grados se alcance alrededor del 2033.