Castillo dice que está «injustamente detenido» mientras Perú sigue incendiado
ACTUALIDAD
Cuatro países de la región piden «respeto a la voluntad popular»
14 dic 2022 . Actualizado a las 09:06 h.«Estoy injusta y arbitrariamente detenido, no estoy por ladrón, por violador, ni corrupto, ni matón. Nunca he cometido ningún delito de conspiración ni rebelión», señaló este martes el expresidente peruano Pedro Castillo, destituido y encarcelado el pasado miércoles, tras ordenar la disolución del Congreso y la reorganización del poder judicial, una acción calificada por la gran mayoría de grupos políticos como un «autogolpe de Estado».
Mientras, el país seguía este martes incendiado. Las grandes protestas en demanda de elecciones inmediatas y de la dimisión del muy impopular Legislativo —tiene un 86% de rechazo en recientes encuestas— dejan, al menos, siete muertos, más de un centenar de heridos, y se extienden por 13 de las 24 regiones del país.
Quienes protestan en las calles, algunos también pidiendo la libertad de Castillo, bloquean especialmente carreteras y también estaciones de autobuses y aeropuertos. Dos de los lugares más turísticos del país, Arequipa y Cusco, la puerta de entrada del Machu Picchu, se encuentran bloqueados.
«Estoy agradecido por su confianza, su esfuerzo, su lucha y su dedicación. Jamás renunciaré y abandonaré esta causa popular que me trajo acá», dijo Castillo, en el contexto de una audiencia en la que la Justicia peruana iba a decidir si continuaba en prisión preventiva o salía en libertad.
Entre tanto, el Gobierno de la izquierdista Dina Boluarte, que asumió el cargo tras el suicidio político de Castillo, mantiene que su intención es realizar elecciones anticipadas en el 2024, un plazo demasiado largo para quienes se manifiestan en las calles, que quieren comicios ya.
Este martes se supo que la Policía Nacional acusa a la ex primera ministra izquierdista Betsy Chávez y a los congresistas Guillermo Bermejo y Guido Bellido, muy cercanos a Castillo, de estar tras el surgimiento de las manifestaciones.
Especial polémica causó un comunicado expedido por Colombia, México, Bolivia y Argentina, países con presidentes izquierdistas, en el que respaldan a Castillo y exhortan «a quienes integran las instituciones de abstenerse de revertir la voluntad popular expresada con el libre sufragio».
México no reconoce a Boluarte
El país que lleva la batuta en la defensa de Castillo es México, a través de su presidente, Andrés Manuel López Obrador, que no reconoce al Gobierno de Boluarte. «Lo del reconocimiento no existe en la diplomacia mexicana. No existe en México lo de reconocimiento a ningún Gobierno extranjero», señaló el presidente del país, que tiene como política la no injerencia en los asuntos de otros Estados y ha sido criticado en México por tomar partido en esta crisis peruana.