El ADN del arrestado apareció en una colilla y en las uñas de la víctima, cuyo cadáver fue localizado en julio en El Ejido con tres heridas de arma blanca
21 nov 2022 . Actualizado a las 12:30 h.La Policía Nacional ha detenido a un terapeuta por la muerte de un paciente y amigo suyo, después de que el ADN del arrestado haya aparecido en una colilla y en las uñas de la víctima, cuyo cadáver fue localizado el pasado mes de julio en El Ejido (Almería) con tres heridas por arma blanca.
Según ha explicado la Comisaría Provincial de Almería en una nota, el cuerpo sin vida presentaba dos heridas en la espalda y otra en el oído y fue localizado en el domicilio del fallecido, que se encontraba «revuelto» y con los cajones abiertos. Los agentes comprobaron además que faltaba la cartera del muerto, su teléfono móvil y las llaves de la casa.
Los investigadores se centraron en el entorno del fallecido y se entrevistaron con un amigo de éste, un terapeuta de Roquetas de Mar (Almería) que se dedica a la asistencia y tratamiento de drogodependientes. Este último aseguró que había hablado con el fallecido durante la mañana del 12 de julio, horas antes de que se produjese la muerte del mismo, en la noche de ese día, de acuerdo a los datos de la autopsia forense.
«Sin embargo, sus declaraciones se contradecían con otras evidencias obtenidas por los investigadores. Asimismo, los agentes observaron que presentaba heridas en ambas manos, lo que justificó diciendo que había estado trabajando recientemente en una finca», señala la Policía.
Se llevó a cabo, en paralelo, un seguimiento del móvil de la víctima, lo que permitió comprobar que había sido utilizado en Roquetas de Mar (Almería) con la tarjeta SIM de un «toxicómano», que fue investigado por este motivo.
La Policía ha señalado que al terapeuta le constan antecedentes policiales por hurto, impago de prestaciones económicas y por robar, este mismo año, en el domicilio de un amigo al que presuntamente le sustrajo unos 8.000 euros.
El segundo hombre investigado, además de tener antecedentes por delitos contra la salud pública, era conocido como receptador de efectos sustraídos por toxicómanos que, posteriormente, venden o intercambian por estupefacientes.
De esta forma, los investigadores pudieron concluir que «el presunto amigo y terapeuta de la víctima» se encontraba en una «situación económica complicada», así como que estaba presuntamente relacionado con otros robos o intentos de robo en domicilios de personas relacionadas, en mayor o menor medida, con el tráfico de estupefacientes a pequeña escala.
Gracias a las gestiones realizadas por la Policía Científica, se pudo confirmar la existencia de ADN del detenido en una de las uñas de la víctima, así como en una colilla recogida de la basura. Por este motivo, y tras informar debidamente al juzgado que sigue la causa, los agentes detuvieron al principal investigado el pasado 15 de noviembre.