El líder de la oposición ve imposible un acuerdo sobre el Poder Judicial tras mantener Sánchez su intención de rebajar las penas del delito de sedición. «Le han temblado las piernas», dice el presidente del Gobierno a su regreso de África
29 oct 2022 . Actualizado a las 14:59 h.El líder del PP, Alberto Núñez Feijoo, ha alejado la posibilidad de alcanzar pactos con el actual PSOE después de dar el jueves por suspendidas las negociaciones para renovar el Consejo General del Poder Judicial y ha avisado al Gobierno de que hay «muchas cosas negociables en democracia» pero el Estado «no es una de ellas» y la justicia es un «caso paradigmático».
«Sé que los ciudadanos añoran acuerdos y pactos de Estado, yo también y estoy seguro de que llegarán con este PP y con otro PSOE», ha afirmado Feijoo en un desayuno informativo del diario El Correo en Vitoria, después de suspender las conversaciones para renovar la cúpula de la Justicia al constatar que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantenía la intención de rebajar las penas del delito de sedición.
Según Feijoo, el Gobierno ha hecho suya la «deslegitimación del Estado» del «independentismo radical que se empeñaba en decir que la transición era la mera continuación del franquismo» y en consecuencia debía ser «socavado poco a poco», una « extraña conversión» que no sabe si es por «convicción profunda» o por «mero oportunismo» para mantenerse en el poder.
Antes de tomar la decisión, Feijoo mantuvo conversaciones con varios barones, como la madrileña Isabel Díaz, Ayuso, el andaluz Juanma Moreno, el murciano Fernando López Miras y otros cargos del partido. La presidenta de la Comunidad afirmó que le parecía «una barbaridad» pactar el CGPJ tras el anuncio de Sánchez sobre la modificación penal del delito de sedición. Moreno le dijo al presidente del PP que era algo «inasumible», y López Miras mostró su «sorpresa» por lo sucedido, según fuentes conocedoras de la conversación y recogidas por Europa Press.
Feijoo también habló con el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda: «Sí que me pidió mi opinión y coincide plenamente con la postura del Partido Popular, pero sí es cierto que me consultó», dijo el presidente del Ejecutivo gallego a preguntas de los medios de comunicación en Ferrol tras mantener en la ciudad naval un encuentro con su regidor, Ángel Mato, del PSOE.
Respuesta del PSOE
Nada más conocerse la decisión adoptada por el PP en la noche del jueves, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó en una conversación con periodistas en Luanda, la capital de Angola donde se encontraba de viaje, que el presidente del PP no ha aguantado la presión. «Le han temblado las piernas, no es autónomo», señaló.
Ya, en la mañana del viernes, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, acusó a Feijoo de haber perdido «todo su crédito» e iniciar su «declive» tras ceder ante la «derecha más extrema», y ha asegurado que la Moncloa mantiene su intención de adaptar el delito de sedición a estándares europeos.
En declaraciones a Rac1, Bolaños ha asegurado que el pacto «estaba hecho», pero que los populares «empezaron a dar largas con algún detalle y cuestión menor», hasta que ayer «rompieron unilateralmente la negociación», a pesar de que Sánchez y Feijoo habían conversado durante una hora y se emplazaron a verse el próximo miércoles.
En lo que ha calificado como «situación calamitosa», el ministro ha considerado que Feijoo «no ha aguantado las presiones de la derecha más radical y reaccionaria», que le ha «doblado el pulso». «Ha perdido su crédito como líder de una derecha democrática, constitucional y razonable», le ha reprochado.
La posición del Gobierno, en todo caso, sigue siendo «la misma» respecto al delito de sedición: «Queremos que la legislación se adecúe a los mejores estándares europeos y es el camino que hay que recorrer», ha aseverado.
Aunque ha reiterado que «no ha habido mayoría parlamentaria hasta la fecha» para reformar el delito de sedición, ha incidido en que los acuerdos y las posiciones de las fuerzas en el Congreso se manifestarán «cuando haya un documento, un texto o un borrador, para que entonces puedan mostrarse a favor o en contra».
Y sobre las críticas de Feijoo al Gobierno por dialogar con los independentistas, Bolaños ha ironizado con que el actual líder popular «deja como moderado a Pablo Casado», su antecesor; y ha recordado que a pesar de las «discrepancias profundas» que el Ejecutivo central mantiene con el independentismo, la «única solución» pasa por el diálogo y «acuerdos transversales».
Bruselas subraya la urgencia de renovar el CGPJ
La Comisión Europea ha subrayado de nuevo este viernes la urgencia de que España cumpla con la renovación del Consejo General del Poder Judicial tras la ruptura del acuerdo entre el PSOE y el PP.
«El informe sobre el Estado de derecho expresa muy claramente la posición (de la Comisión Europea) respecto a que es muy importante emprender la renovación del CGPJ como un asunto prioritario», ha indicado en una rueda de prensa en Bruselas una portavoz comunitaria, quien ha añadido que es igual de urgente «cubrir el vacío» de los nombramientos.
El portavoz jefe del Ejecutivo comunitario, Éric Mamer, ha recalcado que los servicios comunitarios mantienen sin cambios el mensaje «coherente» que desde hace tiempo trasladan a las autoridades españolas, mientras que la portavoz de Interior, Anitta Hipper, ha recordado que el comisario de Justicia, Didier Reynders, estuvo recientemente en Madrid para tratar el asunto con los distintos actores.
«Estamos en contacto con las autoridades españolas, a las que dirigimos una clara recomendación y, una vez más, subrayamos la importancia de reducir la influencia de los poderes legislativo y ejecutivo sobre la judicatura, con el objetivo de fortalecer la independencia judicial», ha resumido Anitta.
El pasado julio, Bruselas incluyó en su informe anual sobre la salud democrática en los Estados miembro una recomendación específica dirigida a España para llamar a la renovación inmediata del CGPJ, al tiempo que instaba a emprender «inmediatamente después» la revisión del sistema de elección de sus vocales para asegurar que la mayoría de ellos son nombrados por sus pares, en línea con los estándares del Consejo de Europa.
«Solo nos queda dimitir en bloque», dicen desde el Consejo del Poder Judicial
Melchor saiz pardo
Los 19 supervivientes del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) siguen sin dar crédito. En la sede de la Calle del Marqués de la Ensenada daban por seguro que esta vez era la buena y que después de cuatro años populares y socialistas iban a ponerse de acuerdo. Nadie imaginaba, como al final ha ocurrido, que el órdago de Carlos Lesmes el pasado 10 de octubre renunciando a la presidencia en vísperas de la Fiesta Nacional para presionar y conseguir la renovación, iba a quedar en nada. «Ya solo nos queda dimitir en bloque», afirmaban desde el Poder Judicial este viernes por la mañana.
El ambiente en el consejo era una mezcla de cabreo, decepción, enfado y miedo. Temor a que la situación enquistada derive en un «colapso total» del sistema de judicial antes de verano, según llegaban a afirmar algunos de los vocales, que alertaban de que el bloqueo va a crear «verdaderos cuellos de botella», ya que muchas de las 64 plazas vacantes que van seguir sin cubrirse son de puestos claves.( 29 plazas en tribunales superiores, entre ellos 7 presidencias; la jefatura de la sala de lo penal de la Audiencia Nacional; 20 presidencias de salas en audiencias provinciales; y 14 magistrados en el Tribunal Supremo).
¿Hasta 2024?
Y es que en el CGPJ, tras el mazazo de la noche del jueves, consideran «muy difícil» que haya un acuerdo de renovación antes de las elecciones locales y autonómicas de mayo del 2023. Es más, con un año electoral del calibre del que se aproxima y con comicios generales a finales del 2023, son muchos los vocales que temen que la situación pueda enquistarse hasta inicios del 2024, un panorama que sería «apocalíptico», en palabras de uno de los progresistas del consejo.
