El Congreso rechaza siete enmiendas a la totalidad con 186 votos en contra, 159 favorables y tres abstenciones
27 oct 2022 . Actualizado a las 21:36 h.El Gobierno dio este jueves un paso adelante casi definitivo en su objetivo de aprobar los Presupuestos para el 2023. El Congreso rechazó por amplia mayoría las siete enmiendas a la totalidad de las cuentas públicas presentadas. Los Presupuestos podrán por tanto continuar ahora su tramitación parlamentaria. El Gobierno obtuvo un marcador final de 186 votos en contra de los vetos a las cuentas públicas (PSOE, UP, ERC, PNV, EH Bildu, PDECat, Más País, Compromís, BNG y PRC), 159 a favor (PP, Vox, Ciudadanos, Junts, Foro Asturias, la CUP, dos expulsados de UPN y un exdiputado de Cs) y tres abstenciones, de Coalición Canaria (2) y Teruel Existe.
Pese a ese resultado favorable, los socios del Gobierno dejaron claro que el apoyo en esta primera prueba de las cuentas públicas no implica el respaldo en la votación final y que ahora seguirán negociando mejoras a través de enmiendas parciales durante el trámite en la Comisión de Presupuestos. El plazo para presentar esas enmiendas finaliza este viernes y las que se registren deberán ser votadas en las próximas semanas. En caso de superar las votaciones de todos los capítulos de las cuentas públicas, el proyecto pasaría a ser examinado por el pleno del Congreso durante la semana del 21 de noviembre y votado el día 24.
El Gobierno necesitará el apoyo de sus socios para conformar una mayoría absoluta que permita aprobar los Presupuestos. De superar con éxito la prueba del Congreso, las cuentas serán remitidas al Senado, donde también se podrán presentar enmiendas, que deberían ser luego refrendadas en la cámara baja. En caso de no salir adelante ninguna de las enmiendas del Senado, los Presupuestos se dan por aprobados en los términos en los que salgan del Congreso.
«La negociación no ha hecho nada más que empezar, seremos minuciosos y exigentes», advirtió el portavoz de ERC, Joan Margall, que no hizo referencia expresa en su intervención a la reforma del delito de sedición que planea el Gobierno. La representante del PNV Idoia Sagastizabal, se felicitó por el acuerdo que permitirá renovar la ley quinquenal del cupo vasco en los mismos términos en los que fue aprobada por el anterior Gobierno del PP. Pero aclaró que eso no es suficiente para garantizar el voto afirmativo del PNV a los Presupuestos. «Diálogo, negociación y búsqueda de acuerdos amplios», será la hoja de ruta de los nacionalistas vascos durante la fase de tramitación. También el portavoz de EH Bildu, Oskar Matute, se mostró exigente y advirtió de que no tienen un pacto de legislatura que le ate al Ejecutivo. «Nuestros votos no han sido ni serán nunca cautivos de este Gobierno», indicó.
Unidas Podemos cerró filas con el PSOE y defendió que la factura de la crisis provocada por la inflación deben pagarla la banca y las grandes fortunas y no las clases populares. El portavoz de Galicia en Común, Anton Gómez-Reino recalcó que tras años de lo que calificó de «violencia presupuestaria» impulsada por el PP, los Presupuestos de este Ejecutivo defienden los intereses de los gallegos y consolidan «el compromiso del Gobierno con Galicia».