Los nacionalistas vascos logran el compromiso de la renovación del cupo en los mismos términos que la ley quinquenal en vigor
21 oct 2022 . Actualizado a las 18:52 h.Tuvo que esperar casi hasta el último minuto, pero el Gobierno tiene ya vía libre para superar la primera prueba de los Presupuestos del 2023. ERC, PNV y EH Bildu, los tres socios principales del Ejecutivo, anunciaron cerca del cierre del plazo que no presentarán una enmienda a la totalidad de las cuentas públicas. Los tres aliados del Gobierno aclararon que el hecho de que no presenten un veto a los Presupuestos no implica un voto final a favor porque queda todavía mucho por negociar.
El Ejecutivo superará por tanto holgadamente la votación del próximo jueves, ya que los grupos que presentan enmiendas a la totalidad (PP, Vox, Ciudadanos, Junts, CUP, Foro Asturias y los dos exdiputados de UPN) suman solo 159 escaños, insuficientes para lograr la devolución de los Presupuestos.
El Gobierno se había asegurado ya la renuncia a presentar un veto por parte de Coalición Canaria, PDeCAT, Más País, Compromís, BNG, Teruel Existe y PRC, con lo que, dependiendo de su voto a favor o la abstención, logrará una suma cercana a los 190 votos.
Tras mantener el suspense, ERC anunció que no vetaría los Presupuestos y justificó su posición afirmando que se trata de «dar margen» y de que «todos los actores contribuyan a generar las condiciones de confianza necesarias para mantener vivas las negociaciones en marcha», en referencia a la desjudicialización del procés. Pese a ello, los republicanos insisten en que están todavía «muy lejos» de dar su apoyo definitivo a unas cuentas del Estado que, a su juicio, tienen «amplio margen de mejora».
Bildu quiere negociar más
EH Bildu repitió el guion del año pasado y anunció al mismo tiempo que ERC su renuncia a vetar las cuentas, pero indicando que resta todavía mucho por negociar para lograr «mejorar las condiciones de vida de la mayoría social y trabajadora» y de los ciudadanos del País Vasco.
El último en anunciar su posición favorable a las cuentas del Gobierno fue el PNV. A cambio, los nacionalistas vascos se aseguraron la renovación de la ley quinquenal del cupo «en los mismos términos y los mismos parámetros» que la existente en estos momentos. Según el portavoz del PNV, Aitor Esteban, la actual ley en vigor abarca el período comprendido entre el 2017 y el 2021, por lo que «estábamos empezando a entrar en un punto de cierta inseguridad jurídica». El acuerdo fue firmado por el exministro de Hacienda del PP Cristóbal Montoro y establecía un cupo base de 1.300 millones de euros de aportación del País Vasco al Gobierno central por los servicios no transferidos a Euskadi.
La posición de ERC
Aunque el asunto sigue siendo objeto de negociación, ERC no aludió en el comunicado en el que anunció el sentido de su voto a su exigencia de que se reforme el delito de sedición. Una cuestión que, según anunció su portavoz parlamentario, Gabriel Rufián, era imprescindible para que su partido dé finalmente su apoyo al Gobierno. El Ejecutivo ha mostrado su disposición a adecuar la tipificación de ese delito a la de los países del entorno europeo, lo que supondría una rebaja considerable en la pena. Pero en las conversaciones con los republicanos ha dejado claro que esa cuestión debe quedar al margen de la negociación de los Presupuestos.
El objetivo final de ERC es que con la reforma del delito de sedición se allane el camino para que puedan regresar a España los líderes independentistas fugados de la Justicia, como el expresidente catalán Carles Puigdemont o la secretaria general de ERC, Marta Rovira.
El BNG no veta las cuentas, pero no desvela aún el sentido de su voto
El BNG anunció que no presentará una enmienda a la totalidad de los Presupuestos, como hizo el año pasado, pero no aclaró el sentido de su voto a las enmiendas presentadas por otros grupos. En el ejercicio anterior, el BNG se abstuvo. El diputado de Bloque Néstor Rego ya mostró en un comunicado su disposición a «dialogar» con en el Gobierno central para negociar un presupuesto que, en su opinión, «dista moito de solucionar os problemas polos que atravesa a sociedade». El BNG demanda un aumento de la inversión en Galicia, en especial en proyectos ferroviarios o saneamiento de las rías, así como un mayor gasto social en pensiones mínimas o salario de empleados públicos. El diputado del BNG avanzó el registro de enmiendas de su partido a los Presupuestos durante la tramitación parlamentaria para que el Gobierno incluya partidas específicas para la regeneración de las rías gallegas y el saneamiento de los ríos, con el objetivo de recuperar el valor ambiental y económico de estos espacios.