Alberto Fernández apuesta por un superministerio de Economía para intentar salvar su Gobierno

Héctor Estepa
héctor estepa BOGOTÁ / E. LA VOZ

ACTUALIDAD

El presidente argentino, Alberto Fernández
El presidente argentino, Alberto Fernández DPA vía Europa Press | EUROPAPRESS

El presidente de la Cámara de Diputados argentina se perfila para encabezar el nuevo departamento

29 jul 2022 . Actualizado a las 09:09 h.

Jornada frenética en la Casa Rosada. El presidente argentino, Alberto Fernández, ultima este jueves el que aspira a ser uno de los mayores cambios en su Gobierno desde el inicio de su andadura, a finales del 2019. Todas las miradas se centran sobre Sergio Massa, actual presidente de la Cámara de Diputados, que está cerca de convertirse en un superministro que aglutine las carteras de Economía, Desarrollo Productivo y Agricultura, pasando a controlar también instituciones como el Banco Central y a manejar las relaciones con instituciones multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI).

El Gobierno argentino, profundamente golpeado por la disputa política entre el presidente y la vicepresidenta, Cristina Fernández Kirchner, vio cómo su crisis se agudizaba el 4 de julio, cuando Martín Guzmán, hombre de confianza del mandatario, dimitió como ministro de Economía.

Fue sustituido por Silvina Batakis, de escasa experiencia en la alta política nacional, cuyo principal valor era ser aceptable tanto para Fernández como para Kirchner. Su mandato, de apenas 26 días, ha sido muy criticado en el país. En este período la cotización del dólar en el mercado paralelo ha subido de los 239 pesos argentinos a los 326 pesos, la inflación —cercana ya al 60 % anual— se ha agudizado y se ha generado una gran controversia en torno al uso de la divisa estadounidense por parte de los argentinos que quieren hacer turismo. La economista podría mantener algún cargo dentro del superministerio destinado a Massa, aún en negociaciones.

El abogado dirige el Frente Renovador, un partido considerado de centro y aliado al peronismo. Criticó profundamente al kirchnerismo hace unos años, e incluso llegó a presentarse a la presidencia en el 2015 en competencia contra el peronismo, consiguiendo un 21 % de los votos, pero volvió al seno del actual oficialismo antes de los comicios del 2019.

Massa se quiere asegurar el control del aparato económico del Estado en bloque. Guzmán dimitió en julio, en parte, porque desde las autoridades del sector energético, dominado por el kirchnerismo, se boicoteó el aumento de tarifas firmado por el Gobierno con el FMI. También quiere certificar tanto el apoyo de Fernández como el de Kirchner. Este jueves el abogado se reunió con la vicepresidenta en el Congreso.

Fernández parece buscar revitalizar su Gobierno con este movimiento. La coalición oficialista, el Frente de Todos, está muy golpeada en las encuestas, cerca de perder la segunda posición en preferencia de voto. El presidenciable es Massa, prácticamente el último cartucho que le quedaba al oficialismo. Después del abogado, se agota la munición.