El brote mundial de viruela del mono es muy probable que tenga un único origen

La Voz MADRID / EFE

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Kiko Huesca | EFE

Un estudio publicado en la revista Nature Medicine hizo un análisis de genoma del virus para intentar establecer la trayectoria evolutiva

26 jun 2022 . Actualizado a las 10:28 h.

El brote de viruela del mono que se ha detectado a la vez en varios países tiene «muy probablemente un único origen» y la cepa es posible que presente cambios evolutivos recientes, según un estudio que publica Nature Medicine.

El mayor brote de viruela del mono descrito hasta ahora en países donde esta enfermedad no es endémica fue identificado en el Reino Unido en mayo y, según los últimos datos de la OMS, se han registrado 3.300 casos en 40 países.

Un equipo del portugués Instituto Nacional de Salud doctor Ricardo Jorge, encabezado por João Paulo Gomes, hizo un análisis de genoma del virus para intentar establecer la trayectoria evolutiva del brote. Los datos indican que la cepa asociada al actual brote es una rama divergente bien definida del virus de un foco de 2018-2019 en un país endémico, Nigeria, exportado a otros y con vinculación genética con otro registrado también en ese país en 2017-2018.

Esta rama divergente puede representar una evolución acelerada en curso, según los autores. El actual virus diverge de los patógenos relacionados de 2018-2019 en unos 50 polimorfismos de un solo nucleótido, o variaciones genéticas, mucho más de lo esperado para los ortopoxvirus. Todas las cepas del brote secuenciadas hasta ahora «se agrupan estrechamente, lo que sugiere que el brote en curso tiene un único origen».

En conjunto, los datos actuales apuntan a un escenario de más de una introducción desde un único origen, con un evento o eventos de superdifusores —por ejemplo saunas utilizadas para encuentros sexuales— y viajes al extranjero que probablemente desencadenaron la rápida difusión mundial. El equipo señala que no se puede excluir la hipótesis de un período prolongado de diseminación críptica (transmisión no detectada) en humanos o animales en un país no endémico, por ejemplo, después de las importaciones reportadas en 2018-2019.

La transmisión silenciosa de persona a persona, entre otras causas por una falta o mala diagnosis, «parece menos probable» si se tienen en cuenta las características conocidas de la enfermedad en los individuos afectados, que suelen ser lesiones cutáneas localizadas o generalizadas.