El método de Ana Rosa Quintana para ayudar a curarse del cáncer

Martín Bastos

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La presentadora comparte su estilo de vida, con alimentación sana, ejercicio intenso y sesiones de yoga «para el alma y para el cuerpo»

06 abr 2022 . Actualizado a las 19:23 h.

Fue el pasado mes de noviembre cuando Ana Rosa Quintana desveló en su programa que tenía cáncer, ya que le habían detectado un carcinoma de pecho. Desde entonces, con fuerza y espíritu positivo, abandonó temporalmente la pequeña pantalla para centrarse en su recuperación. Sus apariciones han sido muy pocas desde entonces, aunque algunos compañeros han ido contando que la presentadora se encuentra muy bien y que cada vez queda menos para que regrese al trabajo.

Para lograr su recuperación, Ana Rosa se ha centrado en cuidarse al máximo con deporte y alimentación sana. Hace seis semanas, la presentadora confesaba que, después de cuatro meses de tratamiento, estaba «muy bien», aunque «rabiosa» por todos los hechos históricos que se estaba perdiendo en el programa, informa Chance. «Trabajando la paciencia y agradecida por tanto cariño», añadía, revelando además que en esta nueva etapa de su vida había centrado su alimentación en verduras y frutas, en alimentos naturales y ecológicos, y había dicho adiós al azúcar, los alimentos procesados, las grasas y el alcohol. «Alimentarse bien y hacer ejercicio funciona», aseguraba con una sonrisa.

Este miércoles Ana Rosa ha compartido un mensaje en el que destaca la importancia que ha tenido para ella el ejercicio físico, en concreto el yoga. Durante estos meses no ha abandonado en ningún momento esta práctica de la mano de su instructora Carmen Cánovas, quien ha escrito en Instagram acerca de la que califica como una de las experiencias más bonitas de su vida: «Ana y yo nos conocemos y practicamos yoga desde hace ya años. Cuando la diagnosticaron, lejos de abandonar la práctica y después de consultar con su oncólogo, decidió continuar. Estos procesos son duros física y emocionalmente, así es que hemos ido adaptando la práctica según las necesidades del momento», explica la instructora en un mensaje compartido por la propia presentadora. Afirma que la práctica de esta disciplina ha sido para la presentadora «nutritiva e hidratante para el alma y una gran ayuda mejorando varios aspectos de la calidad de vida».

«Hemos trabajado fuerza, equilibrio, respiraciones, reducido los niveles de cortisol, mejorado el descanso, etcétera...», ha revelado, señalando que «han sido tiempos de acompañar desde el corazón y de coger la mano para dar aliento».

«Hoy solo puedo decir que estoy muy orgullosa de ella, de su trabajo y perseverancia, de su esfuerzo, de sus ganas de luchar contra la enfermedad, de sus ganas de vivir, siempre con una sonrisa. Escuchando su cuerpo de una manera más consciente, trabajando la energía con sensibilidad y respeto», ha concluido Carmen, consciente de que este post sobre la experiencia de Ana Rosa pueda ayudar a «muchas mujeres en una situación similar, transmitiéndoles que se puede, de verdad que se puede».

Junto a una fotografía en la que la periodista, radiante y con un aspecto estupendo, aparece practicando esta disciplina, Ana Rosa ha correspondido al mensaje de su instructora agradeciéndole por haberle enseñado a amar el yoga estos meses. «Es un ejercicio físico intenso, bueno para el alma y para el cuerpo», ha añadido Ana Rosa.

Una operación en unos días

Con este espíritu positivo, la presentadora afronta una operación a la que tendrá que someterse en los próximos días, tal como reveló este miércoles su compañero Joaquín Prat. «Por su estado de ánimo y su estado físico no parece que va a tener que afrontar esa intervención quirúrgica en apenas de unos días», afirmó el presentador.

«Ayer tuvimos la suerte de comernos un cocido en su casa», reveló Prat, asegurando tras su reencuentro con Ana Rosa que está «espectacular». «Está como siempre. Un poquito más delgada, pero con ese brillo en los ojos, la actitud... Está inalterable», ha añadido emocionado, tras asegurar que por su aspecto nadie diría que se ha sometido al tratamiento de quimioterapia.