Zelenski reprocha a Alemania haber priorizado la economía y el suministro de gas ruso
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En una intervención virtual en el Bundestag asegura que la invasión de Ucrania es un nuevo muro
17 mar 2022 . Actualizado a las 13:08 h.El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, protagonizó una invertención virtual en el Bundestag alemán (cámara baja del Parlamento), en la que fue crítico con el país germano por haber priorizado la economía y el suministro de gas ruso, señalando que las sanciones económicas «son insuficientes y llegan tarde». «Les advertimos de que [el gasoducto germano-ruso] Nord Stream 2 era un arma. Y su respuesta fue economía, economía, economía», manifestó el presidente ucraniano.
Por otra parte, expresó que con la invasión de su país, Moscú contruye un nuevo muro frente a la libertad: «Cada bomba que cae, cada decisión que no se adopta es una piedra con la que se construye ese muro», añadió en una intervención por videoconferencia que había sido saludada con una gran ovación de todo el plenario.
Zelenski se dirigió luego al canciller alemán, Olaf Scholz, al que pidió que «sea el líder que Alemania necesita» y que apoye decididamente a su país, algo que entiende que no puede limitarse a las sanciones económicas hasta ahora dictadas contra el entorno del presidente ruso, Vladimir Putin, informa Efe.
El líder ucraniano enumeró en su mensaje desde los bombardeos sobre la asediada ciudad de Mariúpol al resto de ataques que su país sufre «día y noche», de forma ininterrumpida y «todos los días de la semana». Expresó que «es difícil para nosotros sobrevivir a todo esto sin la ayuda del resto del mundo, defender a Ucrania y defender al mundo libre de Europa», reiterando la metáfora del muro, en alusión al que durante décadas partió Berlín.
Parafraseó ahí el histórico discurso pronunciado en 1987 por el entonces presidente estadounidense Ronald Reagan ante el muro berlinés, cuando pidió al líder soviético Mijail Gorbachov que lo derribara. «Señor Scholz, destruya ese muro», dijo, para lamentar a continuación que su país estaba recibiendo «más apoyo» desde el otro lado del Atlántico que en la propia Europa.