La invasión de Ucrania planea sobre la reunión anual del Parlamento chino
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Planes económicos, medio ambiente y relaciones internacionales centrarán la cita
04 mar 2022 . Actualizado a las 09:03 h.Más de 5.000 altos funcionarios se reúnen en Pekín para celebrar la convención anual de la política china que se conoce popularmente como «dos sesiones»: la anual de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh), un órgano asesor, que abre sus puertas hoy viernes y la Asamblea Nacional del Pueblo (ANP), el plenario anual del Parlamento que se inaugura el sábado, día 5.
Estaba previsto que la hoja de ruta para impulsar la economía y superar la crisis provocada por el covid-19 fueran la parte capital de esta cita, pero la invasión rusa de Ucrania y sus efectos desestabilizadores en la política y economía mundial planean sobre ella.
Aunque China ha aceptado el guante lanzado por Ucrania y ha declarado estar dispuesta a mediar entre los dos países, con los que mantiene excelentes relaciones económicas, su diplomacia no se ha movido del guion inicial de no condenar la invasión de Ucrania, que se limita a calificar de «operación rusa». China se mantiene en su difícil equilibrio de defender la integridad territorial de los Estados y ser comprensiva con lo que describe como legítimas demandas de seguridad del Kremlin.
La reunión del lianghui (dos sesiones en chino) debe establecer la hoja de ruta en materia de economía, comercio, medio ambiente y relaciones internacionales.
La única conferencia de prensa anual que ofrece el ministro de Exteriores Wang Yi, prevista para el día 7, dará pistas sobre si la posición de China sobre su aliado Putin y la invasión de Ucrania variarán.
El primer ministro, Li Keqiang, presentará el «informe sobre la labor del Gobierno». En él se espera que anuncie el objetivo de crecimiento económico más reducido desde 1990, alrededor del 5 % para el 2022. A los problemas de la pandemia, que ha provocado cortes en la cadena de suministros globales, ahora se suman las sanciones a Rusia y la guerra en Europa, uno de los principales mercados chinos.
También se anunciará el incremento del presupuesto militar. La cifra servirá de termómetro para conocer las intenciones de Pekín en seguir aumentando la capacidad de su ejército, con la amenaza de una futura invasión de Taiwán siempre en el horizonte.
La ANP también dará pistas sobre si Pekín tiene previsto flexibilizar su política de cero covid. El gigante asiático mantiene las fronteras cerradas desde el 2020 y solo permite entrar a sus nacionales y extranjeros residentes bajo restricciones y estrictas cuarentenas. La aparición de la variante ómicron, que en Hong Kong está provocando una crisis sanitaria, no favorece una relajación de las políticas.
La sesión de la Conferencia Consultiva recoge iniciativas de la sociedad civil y en esta edición se han presentado, entre otras, propuestas para perseguir el tráfico de mujeres y niños, impulsar la natalidad aumentado los permisos de maternidad y paternidad y prohibir las operaciones de cirugía estética a los menores de 18 años.
Aunque parece controlada la crisis del covid-19, la reunión del Parlamento repite la estructura de pequeño formato del año anterior y durará solo una semana, hasta el 11 de marzo. Se celebra bajo estrictas medidas de seguridad que obligan a los periodistas a seguir los actos y ruedas de prensa aislados en salas frente a pantallas de plasma.
Las dos sesiones tienen más de ceremonia multitudinaria de altos cargos para escenificar el consenso que de reunión o debate político. Los temas llegan siempre pactados y sin espacio para cualquier reforma. La imagen de los legisladores pasando al unísono las páginas del informe en el Gran Palacio del Pueblo y la aprobación por unanimidad se parece más a un acto litúrgico que a un auténtico debate político.