España y Portugal aúnan fuerzas para adelantar los fondos de la PAC y poder hacer frente a la sequía

Jesús Carballo BRUSELAS / LA VOZ

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STEPHANIE LECOCQ

El ministro Planas ha anunciado que en las próximas semanas se convocará una mesa de la sequía para abordar la situación con las comunidades autónomas

22 feb 2022 . Actualizado a las 09:59 h.

Mientras que la tormenta Eunice ha devastado el norte de Europa durante los últimos días con fuertes lluvias y vientos de más de 110 kilómetros por hora, en España apenas se ha hecho notar este pasado fin de semana con precipitaciones ni abundantes ni tampoco suficientes para revertir la situación de sequía que vive nuestro país y las consecuencias que esto tiene sobre el sector del campo. Y es que la Península Ibérica vive un momento de «sequía severa» que, en palabras de Luis Planas, ministro de Agricultura «no es una novedad en si, lo que es una novedad es que sea tan fuerte y en períodos tan recurrentes de tiempo», aseguró achacándolo indudablemente al cambio climático. Además Portugal arrastra su peor sequía desde el 2005 «con un 50% menos de precipitaciones de lo que suele ser normal» en esta época del año según apuntaba su homóloga lusa, Maria do Céu Antunes.

Por ello, ambos países han traído a Bruselas, aprovechando la celebración del Consejo de Agricultura del mes de febrero, la presentación conjunta de un plan para intentar «revertir los efectos de la sequía». Han trasladado a la Comisión Europea que se incremente la dotación de los adelantos de la PAC para 2022 y que se flexibilicen las condiciones del uso de superficies de barbecho e interés ecológico para aliviar la escasez de agua que vive la Península Ibérica. Han solicitado además «acciones específicas de apoyo al sector agrario y ganadero» con cargo a los fondos de desarrollo rural, de igual forma que había sucedido durante la pandemia. 

Una batería de peticiones en la que se pide también que se aplique «la cláusula de fuerza mayor» a los cultivos para aumentar las prácticas de diversificación «o utilizar los fondos destinados al desarrollo rural para proveer de una ayuda inmediata a los agricultores y ganaderos» matizaba do Céu. En España «las cuencas del Guadiana y del Guadalquivir están a un 60% de su capacidad» añadía Luis Planas asegurando que Andalucía y Extremadura son las zonas que afrontan «un período de sequía más intenso». El ministro ha recordado también que entre el pasado mes de octubre y este mes de febrero la pluviometría en España «se ha reducido en un 38%» respecto a la media de los últimos 30 años.

 Ante la fotografía de la situación que atraviesa la Península Ibérica, el comisario de Agricultura, Janus Wojciechowski, ha tomado nota alegando que tanto España como Portugal «aprovechen al máximo los planes de la PAC para afrontar los retos que planea la escasa pluvialidad para que los agricultores estén protegidos ante los posibles eventos meteorológicos». Unas declaraciones que han ido muy en la línea del apoyo expresado por parte de países como Grecia, Rumanía o Malta, muy identificados con la causa.

 Pasos a dar en la Península Ibérica

 Una visita a Bruselas en la que el ministro Planas ha aprovechado también para adelantar que en las próximas semanas se convocará en España una mesa de la sequía que servirá como medio de interlocución entre el sector y las comunidades autónomas para analizar qué medidas se pueden implantar para paliar los efectos de la falta de agua.

Por su parte, la ministra do Céu, en declaraciones a La Voz de Galicia, aseguraba que, ante esta sequía, no tienen pensado construir nuevos embalses como el de Alqueva en el Alentejo, el más grande de Europa occidental y que, pese a este problema, se encuentra casi al 80 por ciento del agua que alberga. Lo que si «tenemos pensado es valorizar los recursos para conseguir mayor capacidad para retener el agua en las albuferas» y «utilizar agua salada y desalinizarla como se hace en España».