Yolanda Díaz lanzará su plataforma transversal y afirma que ella no es «un proyecto político» ni tiene partido

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

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La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, durante el debate de la reforma laboral en el Congreso.
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, durante el debate de la reforma laboral en el Congreso. EDUARDO PARRA / EUROPA RESS

La vicepresidenta segunda del Gobierno dio a entender que habría dimitido si la reforma laboral no hubiera salido adelante y afirma que «no es el momento» para un referendo sobre la Monarquía

07 feb 2022 . Actualizado a las 09:18 h.

«No soy un proyecto político», «no tengo partido» y «no es el momento» para un referendo sobre la Monarquía. La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, marcó distancias con Unidas Podemos y, sin asumir todavía ningún compromiso concreto en torno a las fechas, dio a entender que ya ha tomado la decisión de impulsar una «herramienta política» transversal que trascienda las siglas de Podemos. Una plataforma que calificó como «algo grande». Aunque insistió en que los partidos son lo de menos, precisó que, de confirmarse el proyecto, contaría con gente de Podemos, de En Comú Podem y de Compromís, e insinuó incluso la posibilidad de sumar al socialista Eduardo Madina.

Díaz ddmitió que es complicado impulsar un proyecto político sin el respaldo de un partido, pero señaló que lo «difícil» es hacer que «la sociedad sea la protagonista» y se sitúe fuera de la «jauría política». Aunque reconoció que el Ejecutivo tiene «muchas almas» y cuestionó la política de «partidiños» aseguró, en cualquier caso, que la coalición de Gobierno «goza de muy buena salud a pesar de los agoreros».

En la primera parte de una entrevista en Salvados, en La Sextarealizada antes de la rocambolesca votación de la reforma laboral en el Congreso, admitió que la decisión de lanzar o no ese proyecto dependía del resultado de ese debate. Y, ya en la segunda parte, grabada inmediatamente después de esa convulsa jornada, insinuó que habría dimitido «por coherencia» si no se hubiera aprobado y rebajó cualquier trascendencia por el hecho de que la reforma saliera adelante gracias al error de un diputado del PP.

Respecto a que la reforma laboral aprobada no haya derogado la del PP, como prometió el Gobierno de coalición, indicó que «el problema del país no es el despido» sino «la precariedad», aunque aseguró que a ella y a Podemos les hubiera gustado elevar la actual indemnización de 20 días por año trabajado en los despidos procedentes.

Yolanda Díaz insinuó que tanto ERC como el PNV votaron en contra porque sabían que se iba a aprobar y reprochó a los hasta ahora socios habituales del Gobierno la «enorme irresponsabilidad» que supone haber puesto en peligro la nueva legislación del mercado de trabajo.