La ONU evalúa la situación de los migrantes varados en la frontera entre Polonia y Bielorrusia

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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Personas que se alojan en el centro de transporte y logística Bruzgi, en la frontera bielorruso-polaca, en la región de Grodno.
Personas que se alojan en el centro de transporte y logística Bruzgi, en la frontera bielorruso-polaca, en la región de Grodno. MAXIM GUCHEK / BelTA

Inspeccionó el improvisado centro de acogida abierto cerca del puesto de control fronterizo de Bruzgui para dar cabida a cerca de dos mil personas que quieren llegar a la UE

21 nov 2021 . Actualizado a las 09:12 h.

La ONU inspeccionó ayer el improvisado centro de acogida que Bielorrusia abrió cerca del puesto de control fronterizo de Bruzgui para los cerca de 2.000 migrantes que quieren llegar a la Unión Europea (UE) a través de Polonia, donde la Guardia Fronteriza continúa registrando intentos de cruce, aunque menos.

Por segunda vez desde el día 11, el jefe en Bielorrusia de la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), Mulusew Mamo, así como su compañera de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Mahym Orazmuhamedova, se trasladaron a Bruzgui para evaluar la situación de los migrantes varados, en su mayoría procedentes de Oriente Medio, informa la agencia Efe.

Hay 1.833 personas acogidas en la nave industrial de Bruzgui abierta desde el día 16. A diferencia de la semana pasada, cuando los migrantes estaban en campamentos improvisados en el bosque cerca del puesto de control fronterizo, ahora en el centro logístico «las condiciones son mucho mejores», dijo Mamo, que añadió que ello no quiere decir que las condiciones sean buenas. «Faltan muchas cosas», afirmó y explicó a los medios que los migrantes se quejaron sobre todo de la falta de comida, atención médica, fármacos y ropa.