Sánchez afronta una crisis de Gobierno que reequilibra el poder en el Ejecutivo

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

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La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz; la titular de Economía, Nadia Calviño; el entonces vicepresidente y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en un acto en la Moncloa el pasado marzo
La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz; la titular de Economía, Nadia Calviño; el entonces vicepresidente y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en un acto en la Moncloa el pasado marzo JESÚS HELLÍN

La evolución del pulso entre Nadia Calviño y Yolanda Díaz es la mayor incógnita tras la salida de Iglesias

30 mar 2021 . Actualizado a las 09:00 h.

Pedro Sánchez afronta este martes su quinta crisis de Gobierno desde que preside el Ejecutivo. La segunda desde que gobierna en coalición, tras la salida de Salvador Illa de Sanidad, y la primera que no obedece a su prerrogativa de nombrar o destituir ministros. Porque los cambios le vienen impuestos por la decisión del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, de abandonar el Gabinete para ser candidato en las elecciones de la Comunidad de Madrid. Un único movimiento que provoca, sin embargo, un reequilibrio de poder en el Ejecutivo, en el que Unidas Podemos pierde la vicepresidencia segunda en favor de la ministra de Economía, Nadia Calviño, mientras que la titular de Trabajo, Yolanda Díaz, baja un peldaño respecto al puesto de Iglesias y asume la vicepresidencia tercera. Más allá de que en Moncloa se da por hecho que Iglesias incrementará la presión al sector socialista del Gobierno cuando deje la vicepresidencia, la evolución de la pugna que mantienen hasta ahora Economía y Trabajo es una de las mayores incógnitas del nuevo dibujo del Gabinete.

Nadia Calviño estaba jerárquicamente por detrás de Pablo Iglesias en el organigrama, lo que ayudaba a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, en su pulso continuo con Economía en cuestiones como la reforma laboral, que se presenta como el gran caballo de batalla del resto de la legislatura, la subida del salario mínimo interprofesional o la extensión de los ERTE. En no pocas ocasiones, Sánchez acabó inclinando la balanza del lado de Díaz para evitar el choque con Iglesias. Ahora, con Calviño sin ningún miembro de Podemos por encima de su cargo, la duda es si la titular de Economía se mostrará más inflexible en sus posiciones, lo que elevaría la tensión interna, porque, en el lado contrario, Díaz se siente también reforzada al ascender a vicepresidenta.

Aunque la relación de Sánchez con la ministra de Trabajo es excelente, con Iglesias mantenía un diálogo casi de igual, al ser este el líder de Unidas Podemos. Ese diálogo personal, fuera de la mesa del Consejo de Ministros, ha desatascado muchos desencuentros entre ministerios. Ahora no ocurrirá lo mismo con la vicepresidenta Díaz, porque será Iglesias quien seguirá marcando, pero ya desde fuera, hasta dónde llegan los desafíos de Podemos.

El líder del PCE releva a Belarra

Todo indica que, en aras de la estabilidad, Sánchez limitará la crisis a lo dispuesto por Iglesias, sin mover más sillas que el nombramiento como ministra de Derechos Sociales de Ione Belarra, que asumirá su cargo mañana, al igual que Calviño y Díaz, y será sustituida por el secretario general del PCE, Enrique Santiago, en la Secretaría de Estado para la Agenda 2030. Si no hay más cambios de carteras, Sánchez habrá tenido 32 ministros en 34 meses como presidente. Sanidad ha cambiado de manos cuatro veces y las de Política Territorial y Cultura, tres. Pero, al margen de los cambios en el Consejo de Ministros, el hecho de que las elecciones en Madrid se hayan convertido una pugna política de alcance nacional ha provocado también la salida de altos cargos del Ejecutivo para reforzar las listas del PSOE y de Unidas Podemos. La secretaria de Estado de Migraciones, Hana Jalloul, la de Deporte, Irene Lozano, y el director general de Políticas de Discapacidad, Jesús Celada, irán en la lista de Ángel Gabilondo. Y, por parte de UP, Beatriz Gimeno, directora del Instituto de la Mujer, integrado en el Ministerio de Igualdad, se incorpora a la candidatura encabezada por Iglesias.